Crece la incertidumbre en Nuevo León: dos gobernadores a la espera de la decisión definitiva del Congreso
El político de MC, que ha anunciado que abandona la carrera presidencial, impide el paso al Palacio de Gobierno al gobernador interino, avalado por la Justicia. El parlamento estatal, con mayoría de la oposición, tiene la última palabra
Nuevo León ha amanecido sumergido en la incertidumbre jurídica. El ex vicefiscal, Luis Enrique Orozco, se ha asumido como gobernador interino de Nuevo León con el respaldo del fallo de la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Pero la mañana de este sábado ha encontrado el Palacio de Gobierno con las puertas cerradas. Las últimas horas en el estado norteño han estado marcadas por anuncios de último momento. El fallo de la Corte ha empujado a...
Nuevo León ha amanecido sumergido en la incertidumbre jurídica. El ex vicefiscal, Luis Enrique Orozco, se ha asumido como gobernador interino de Nuevo León con el respaldo del fallo de la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Pero la mañana de este sábado ha encontrado el Palacio de Gobierno con las puertas cerradas. Las últimas horas en el estado norteño han estado marcadas por anuncios de último momento. El fallo de la Corte ha empujado a Samuel García a abandonar la carrera presidencial y retomar sus funciones como gobernador en un intento de taponar la llegada de Orozco, aupado por la oposición. Sin embargo, el Congreso estatal es el que tiene la última palabra sobre la anulación de su su licencia de seis meses, que comenzó a correr a partir de este sábado. Orozco no ha descartado despachar desde una sede alterna ante la imposibilidad de ingresar al Palacio de Gobierno, donde había agendado una primera reunión con el gabinete estatal. De momento, hay dos gobernadores a la espera de la decisión final del Congreso.
Dentro del clima de incertidumbre general, no hay fecha segura para la reunión del pleno parlamentario, quién tiene la última palabra. Mientras tanto, el presidente del Congreso, el panista Mauro Guerra, ha anunciado mediante un comunicado que la licencia de García sigue vigente y que Orozco es el gobernador interino al cargo. “Si el ciudadano Samuel García quiere quedarse ilegalmente en su cargo, será bajo su responsabilidad constitucional y electoral; reitero no existe ningún impedimento con la licencia de separación del cargo, esta sigue vigente”, ha enfatizado.
La disputa por el Gobierno de Nuevo León está resultado en un episodio rocambolesco para la política mexicana. Tras la decisión de la Corte, Orozco sí pudo entrar la noche del viernes al palacio de Gobierno. Tras su entrada a la sede del Ejecutivo, el ex vicefiscal permaneció solo unos minutos dentro y salió a dar un mensaje a los periodistas que le esperaban en la puerta, en el que informaba de la resolución de la Corte que lo avalaba como gobernador interino. Mientras hablaba, el secretario de Gobierno, Javier Navarro, ha salido acompañado de elementos de la Fuerza Civil para interrumpir a Orozco y anunciar que García volvía a ser el gobernador de Nuevo León. ”Quiero que me hagan entrega de la administración, soy el gobernador interino” respondía el mandatario sustituto. “El gobernador está reasumiendo el cargo, aquí está el documento. Reasume funciones como gobernador constitucional electo” lanzó el funcionario ante el rechazo del hasta hace poco vicefiscal. El regreso de García ya había sido publicado en el periódico oficial de Nuevo León. Tras el inédito momento, en punto de las dos de la mañana, García salió por la puerta trasera del Palacio de Gobierno. Con un semblante desencajado y en medio de los cuestionamientos de la prensa, únicamente se ha limitado a decir una frase. “Reasumimos funciones“. Aunque se ha negado a responder si con ello renuncia a su candidatura presidencial.
Con esta decisión, la candidatura presidencial de García se disuelve. La Constitución establece que para aspirar a la presidencia de la República un funcionario público como García debe separarse del cargo seis meses antes, requisito indispensable que dejaría de cumplir el gobernador a partir de este sábado.
La pugna por la gobernatura de Nuevo León comenzó hace unas semanas cuando García pidió una licencia de seis meses al Congreso estatal. Esa concesión sumió a los legisladores en un debate sobre la elección del gobernador interino. Mientras García pedía que su secretario de Gobierno asumiera el puesto, el Congreso buscaba que uno de los suyos ocupara el cargo. La tensión llevó al gobernador García a presentar controversias constitucionales que le fueron admitidas. Además, comenzó una lucha en los tribunales entre las dos partes por tener la razón.
El Congreso eligió el pasado miércoles a Luis Enrique Orozo, ex vice fiscal del Estado, como gobernador interino en una sesión acalorada, incluso violenta en la que hubo enfrentamientos entre legisladores y simpatizantes de García. Ante la decisión del Congreso local García sostuvo hasta el último minuto del viernes la versión de que él tomaría la licencia y Navarro asumiría la gubernatura interina. Incluso, el gobernador rechazó los recursos que la oposición había presentado ante la Justicia para impedir su salida del Gobierno.
El gobernador electo ha de informar al Congreso del Estado sobre su decisión de mantenerse en el cargo para que lo reincorpore a sus funciones. En tanto eso no ocurra, Orozco ostenta el cargo de gobernador interino. Por ello se prevé que el Legislativo sesione en el transcurso de este sábado para dar entrada a la cancelación de la licencia del emecista.
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