Paulino Alonso Rivera, responsable de monitoreo del Centro Nacional de Prevención de Desastres.Foto: Marco Ugarte (AP) | Vídeo: AP

El equipo de 13 científicos que monitorea al Popocatépetl día y noche

Desde 1994, el volcán ha emitido gases, cenizas y rocas incandescentes

La tensión por la creciente actividad del Popocatépetl ha puesto el foco en el sistema de monitoreo que desde hace décadas supervisa el estado de uno de los volcanes más activos del mundo. Desde 1994, el volcán ha emitido gases, cenizas y rocas incandescentes. Pero en las últimas semanas constante expulsión de ceniza ha llevado a Protección Civil a aumentar el nivel de alerta, que ahora sube de la fase 2 a la fase 3 de la alerta amarilla.

Desde Ciudad de México, un equipo multidisciplinario de 13 científicos supervisa día y noche la actividad volcánica. Desde este punto se miden movimientos sísmicos que indican que la roca volcánica y los gases se elevan hacia el cráter. También se rastrean patrones de viento para poder alertar a la población en caso de caída de ceniza.

Para condensar el resultado de estas observaciones, se introdujo el semáforo volcánico con tres colores: verde para seguridad, amarillo para alerta y rojo para peligro. Por ahora, el nivel de alarma no contempla evacuaciones y pide a la población tomar medidas como permanecer en interior en áreas cercanas al volcán y cerrar ventanas y puertas.

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