Ciudad de México pasa a semáforo verde por primera vez en la pandemia
La capital ampliará el margen de sus actividades económicas y lugares de recreo de forma paulatina durante el mes de junio
Ciudad de México ha alcanzado, por fin, el semáforo verde. No es poca cosa tratándose de una de las zonas del país que ha vivido de forma más acusada la pandemia, con una población de nueve millones de habitantes y una complicada periferia con difíciles condiciones sanitarias y de habitabilidad. La caída sostenida del número de contagios ya vaticinaba el cambio en el color del semáforo, pero en modo alguno, da paso este a la normalidad, ni siquiera a ...
Ciudad de México ha alcanzado, por fin, el semáforo verde. No es poca cosa tratándose de una de las zonas del país que ha vivido de forma más acusada la pandemia, con una población de nueve millones de habitantes y una complicada periferia con difíciles condiciones sanitarias y de habitabilidad. La caída sostenida del número de contagios ya vaticinaba el cambio en el color del semáforo, pero en modo alguno, da paso este a la normalidad, ni siquiera a una nueva normalidad, puesto que aún falta mucho para que la ciudadanía se libere del cubrebocas y de los protocolos de protección que se usan en los espacios públicos. Además de la vuelta a las aulas, el verde, por ahora, solo significa una ampliación de los márgenes de la actividad económica, que en ningún caso llegan al 100% de su desempeño.
“Gracias al esfuerzo de todas y todos, la ciudad pasará a semáforo verde la próxima semana”, ha celebrado la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum. Y ha recomendado con insistencia que nadie baje la guardia.
“La pandemia sigue en la ciudad, en el país y en el mundo entero”, ha dicho Sheinbaum. “Lo que muestra el semáforo es solo que se han reducido los indicadores”. Este viernes, en los hospitales de la capital están ingresados 614 personas con covid-19, lo que supone una disminución de 144 pacientes en relación con el viernes pasado. En el caso de la Zona Metropolitana del Valle de México las personas hospitalizadas por coronavirus suman 835.
Los cambios respecto a la semana pasada, cuando aún se permanecía en semáforo amarillo, no son muy reseñables, apenas una ampliación de aforos en algunos establecimientos o de horarios, que, en ciertos casos, además, serán paulatinos a lo largo del mes de junio. “La recuperación del empleo es importante para nosotros”, ha dicho la jefa de Gobierno. Ese es el equilibrio que se busca, de tal forma que se permiten, por ejemplo, eventos en espacios cerrados con fines de lucro, pero ninguna ceremonia en los centros educativos. O que se pueda vender alcohol en estadios y plazas de toros, pero sigan cerrados los antros y bares, prácticamente los únicos que permanecen cerrados aún. En el caso de los establecimientos con licencia de bar o cantina, el cierre no es del todo cierto, algunos están legalmente abiertos a pesar de que operan en el interior del local. Se ha dejado hacer una pequeña trampa, cual es obligarles a ofrecer comida para que tengan una equiparación con los restaurantes. Otros abren de forma clandestina.
El 7 de junio inicia la reapertura de los centros escolares, aunque la presencia de alumnado es voluntaria. También a partir de esa fecha, los hoteles podrán ampliar su aforo hasta un 60%; las tiendas, un 50%, el mismo que las plazas de toros, los estadios y los salones de fiestas. Los restaurantes podrán cerrar en el interior a las 12 de la noche, una hora más tarde. Ya el 14 de junio, los eventos deportivos al aire libre podrán llenar su aforo a la mitad y reinician las clases grupales en los gimnasios con 10 asistentes como máximo y 15 metros cuadrados por persona. Los lugares que tengan un aforo para 1.500 personas o más solo podrán ocupar el 25% y el espectáculo durará como máximo dos horas. En centros de convenciones la presencia no excederá los 40 minutos.
Los cubrebocas y la sana distancia, así como los protocolos sanitarios en los lugares públicos, siguen en plena vigencia y no cabe pensar que se eliminarán mañana. Como en el resto del mundo, la normalidad no es la misma que se vivía antes de la pandemia. En todo caso, “son buenas noticias para la población. Felicidades”, ha dicho Sheinbaum, quien en todo momento ha repetido que no se debe bajar la guardia y ha recomendado mucha precaución a aquellos que no estén vacunados y a los que aún les falta completar el tratamiento con una segunda dosis.
Como balance de este año largo de pandemia, Sheinbaum ha dicho que siempre han trabajado de forma coordinada con el Gobierno federal. “Hemos puesto todo nuestro esfuerzo, dedicación y asesoría al servicio de la población, tratando de que no faltaran camas hospitalarias. En el mundo, cada quien lo ha hecho a su manera, nosotros hemos estado pendientes de las dificultades que se podían presentar”, ha añadido.
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