Los escándalos que afectan al PP
El operativo del supuesto espionaje a cargos del PP madrileño por parte de responsables del Gobierno de Esperanza Aguirre lo integraban, al menos, tres ex guardias civiles, fichados en septiembre de 2007 como asesores por el consejero de Interior, Francisco Granados; y tres ex policías nacionales, contratados en la misma época por quien era director general de Seguridad, Sergio Gamón, hombre de confianza de la presidenta autonómica.
Esta todo ahí, en ese vídeo. Mariano Rajoy, en la sede del PP, rodeado por los máximos dirigentes de su partido, el 11 de febrero de 2009, se coloca frente a un atril y dice: "Esto no es una trama del PP, como algunos pretenden. Esto es una trama contra el PP".
Primer aniversario del accidente de Spanair
"Ojalá hubiera sido al revés". Loreto González Cabañas, de 55 años, pasó seis semanas en coma. Cuando despertó supo que su única hija, Clara, de 23, había muerto en el mismo avión del que ella había salido milagrosamente con vida. Es una de las 18 supervivientes del MD-82 de Spanair que el 20 de agosto del año pasado se estrelló en Barajas llevándose por delante la vida de 154 personas, entre ellos 17 niños y dos bebés.
Un cambio de normas que llega dolorosamente tarde. La Administración Federal de Aviación (FAA) ha propuesto la revisión de la normativa (de 1977) sobre alarmas a la tripulación en los aviones, 22 años después del accidente del MD-82 en Detroit (Michigan), que los expertos consideran un precedente del siniestro del JK 5022 de Spanair el año pasado.
NATALIA JUNQUERA | Madrid
La Ertzaintza impidió ayer en San Sebastián dos manifestaciones a favor de los presos de ETA, una convocada por el Movimiento pro Amnistía y otra que surgió de una manera más espontánea al ser disuelta la primera. El juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco había prohibido la marcha.
La T-4 del aeropuerto madrileño de Barajas se quedó anoche a oscuras. Un incendio originado en una cabina de transformación, ocurrido sobre las 11 de la noche, la dejó sin electricidad y afectó igualmente a la terminal satélite.
Ángel García Rubio vendió su piso de Madrid y en febrero de 2008 se trasladó a vivir a Honduras con su esposa, Kenya Eroita Morales, una hondureña que trabajaba en el establecimiento que tiene Orange en un centro comercial de la M-40 de Madrid.