"Nosotros no venimos a restaurar ningún pasado ni a derribar lo que hicieron bien nuestros antecesores". En la defensa ante el Parlamento del programa con el que el PP ganó las elecciones del 1 de marzo, el aspirante popular a la Presidencia, Alberto Núñez Feijóo, trató de distanciarse del pasado y presentarse ante los diputados y ante la opinión pública como un representante "de la Galicia nueva" que quiere gobernar "sin rencores ni dogmas".
Faltaron los grandes éxitos de la campaña. Ni el Audi, ni los muebles de diseño, ni el yate, que tanto resultaban en los mítines. Tan solemne ocasión requería un mensaje distinto, así que desde el atril Alberto Núñez Feijóo retomó el otro programa electoral, que el futuro presidente acostumbra a llamar "contrato con los ciudadanos".
Ni los 500 metros ni el 80% de la costa. El presidente de la Confederación de Empresarios de Galicia (CEG), Antonio Fontenla, criticó ayer los criterios del bipartito para la elaboración de la Lei de Protección do Litoral y apostó por una legislación que proteja "por tramos" la costa gallega.
La polémica está servida. Si ya había controversia, y grande, en A Coruña por el proyecto de ampliación del aeropuerto de Alvedro, situado en el municipio de Culleredo (27.000 habitantes), a ocho kilómetros de la capital provincial, las conclusiones del estudio de impacto ambiental de esta obra.
La sección de crítica de la Asociación de Escritores en Lingua Galega escogió Hordas de escritura, de Chus Pato, y Festina lente, de Marcos Calveiro, como mejores representantes de la poesía y la narrativa gallega en los Premios de la Crítica española.
SILVIA R. PONTEVEDRA | Santiago
Un funcionario de Monforte está considerado el mejor doble del Generalísimo