ALMUERZO CON... JORDI SIERRA I FABRA
"Escribir es un orgasmo continuo"
TEREIXA CONSTENLA
En las bacanales de estilo hollywoodiense donde la cocaína se servía en bandejas, Jordi Sierra i Fabra (Barcelona, 1947) pedía un vaso de leche. Un tipo raro aquel crítico musical español. Mucho rock, mucha melena, mucho hippismo, pero ni whisky, ni porros ni amores libres. "En España éramos hippies mentales. No fumo ni bebo", confiesa.