Las turbulencias políticas se detuvieron por fin anoche en Holanda con la victoria de la democracia cristiana (CDA), que, con el 97,1% de los votos escrutados, había obtenido 43 de los 150 escaños del Parlamento. El grupo del asesinato líder ultraconservador Pim Fortuyn salió de la nada para ganar 26 escaños. Le seguían, empatados a 23, los liberales de derecha (VVD) y los socialistas (PvdA).
Mucha tranquilidad y cierto despiste caracterizaron ayer a los votantes de Rotterdam, la ciudad de Pim Fortuyn, cuyos habitantes votaron en masa (70%). Un 29,6% respaldó al partido del líder asesinado, convirtiendo la Lista Pim Fortuyn en el grupo más votado de la mayor urbe holandesa (600.000 habitantes). El Ayuntamiento piensa ya en erigir un monumento al político populista.
El presidente palestino, Yasir Arafat, anunció ayer la convocatoria de elecciones y la puesta en marcha de una serie de reformas políticas en todos los sectores de la Administración y del Gobierno.
Las repercusiones del discurso de Jimmy Carter en el Aula Magna de la Universidad de La Habana, donde el ex presidente norteamericano pidió el levantamiento del embargo de Estados Unidos, pero animó a Fidel Castro a que acepte el envite de los disidentes y convoque un referéndum sobre el cambio político en Cuba, fueron notables.
J. J. AZNÁREZ | La Habana
El ex presidente estadounidense critica el bloqueo impuesto a la isla por su país y reclama de Castro un referéndum
A sus tradicionales ocupaciones de política exterior y del control del arma nuclear, el presidente francés, Jacques Chirac, sumó ayer el mando personal sobre el Consejo de Seguridad Interior, un organismo coordinado hasta ahora por el primer ministro.
CUMBRE UNIÓN EUROPEA-AMÉRICA LATINA
En Río de Janeiro, Fidel Castro ensalzó el euro, Hugo Chávez esbozó la idea de una república bolivariana suramericana y Jacques Chirac apretó los dientes y aceptó la apertura de negociaciones con Mercosur no sin antes tildar de enemigo de los intereses franceses al entonces comisario europeo Manuel Marín.
EMILIO MENÉNDEZ DEL VALLE
México, cuya presidencia retuvo durante 71 años el Partido Revolucionario Institucional (PRI), pugna todavía por ser un verdadero Estado de derecho y una democracia con resultados, pero acude a la II Cumbre UE-América Latina y Caribe con una estabilidad política y económica ausente en buena parte de los países vecinos.
JOSÉ MIGUEL LARRAYA | Madrid