DESAYUNO CON... JUAN LUIS GALIARDO
"Un hombre sin cuernos es como un jardín sin flores"
Llega al desayuno después de haberse tomado un litro de agua y una piña afrodisiaca; fue uno de los galanes más guapos del cine español, y cuando aún era, decían, apetitoso tuvo una depresión agudísima de la que le salvó la llamada de su hija, una niña. Estaba en Oslo, entre nieves, rodando con Charlton Heston, y se sintió una piltrafa. Era 1972.