Freno a la destrucción de la ciudad visigoda
El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, frenó ayer de manera inesperada la urbanización de 1.300 viviendas planeada sobre la ciudad visigoda de Toledo. Cuando las máquinas ya excavaban las zanjas del colector en los terrenos de la Vega Baja esquivando los restos de los muros visigodos el presidente manchego entró en escena tras una reunión mantenida con el presidente del Gobierno y anunció el freno a las obras.