"Una salvajada sin sentido"
Tras la 'cacería' de 100 vacas, la Junta de Castilla y León suspende la matanza de las reses abandonadas
"¿Qué cazador es ése que acorrala a un ternero de semanas y le mete un tiro entre ojo y ojo? Es como quien mata a un niño indefenso". Son las palabras fuertes de Toño González, de 48 años, hijo y nieto de cazadores del valle del Sil, en el Bierzo. "Matar vacas a tiros es aberrante, no huyen, son animales lentos, torpes, enormes... No me entra en la cabeza. ¡Lo bonito que es recechar un corzo!". Al otro lado de la montaña llamada El Morredero, al suroeste de León, unos colegas de Toño ostentan desde hace una semana un macabro récord de vacas y terneros tiroteados. Casi 100 en dos fines de semana. "Una salvajada sin sentido".