Se busca culpable para la tragedia de los incendios de Los Ángeles

La tragedia de los incendios de Los Ángeles carece de un origen. Tres semanas después, las autoridades federales han aportado escasas pistas del inicio de los dos fuegos que ocasionaron la muerte de al menos 28 personas y arrasaron con 16.250 inmuebles tanto al este como al oeste de la ciudad. En uno de los casos, en el de Eaton, las pruebas apuntan al papel que la eléctrica Southern California Edison pudo haber tenido en la ignición del siniestro, donde murieron 17 personas.

La empresa argumentó el lunes en tribunales que cuatro de sus líneas de alta tensión que corren sobre el cañón Eaton registraron un incremento de voltaje a las 18.11 del martes 7 de enero, siete minutos antes de que se avistaran las primeras llamas en las colinas de Altadena. Los abogados de la eléctrica afirman que el incidente ocurrió a unos ocho kilómetros de donde nació el fuego, que creció fuera de control alimentado por los vientos huracanados de Santa Ana. Se registraron ráfagas de hasta 94 kilómetros por hora minutos antes del siniestro.

Una portavoz de Edison asegura que el incremento se encuentra dentro de los parámetros normales de operación y recordó que una investigación interna preliminar ha descartado, por el momento, fallas o daños en las líneas de transmisión sobre el cañón Eaton. Los representantes legales de la compañía y el bufete Edelson PC, un despacho que representa a Evelyn Cathirell, la madre de una de las víctimas, han acordado mantener por 21 días toda la información y evidencia de los equipos conectados y vinculados a las torres que registraron la variación del voltaje.

El despacho Edelson hizo público este domingo un video que capta el supuesto momento en el que inició el fuego de Eaton. Las imágenes fueron grabadas por una cámara de seguridad de una gasolinera ubicada a menos de dos kilómetros de distancia al sur del punto donde se registró el incendio. El chispazo y las primeras llamas que le siguen se registraron sobre las 18.11 cerca de tres torres del cañón Eaton.

“Esta es la prueba más clara e incriminatoria hasta el momento”, señaló en un comunicado Jay Edelson, el abogado fundador del bufete, quien señaló que la evidencia existe por “mera suerte”.

Edelson prepara una demanda colectiva contra la compañía por su presunta responsabilidad en la que es ya una de las mayores catástrofes en la historia de Los Ángeles. La demanda de Cathirell, madre de Evelyn McClendon, se suma a otros litigios en marcha que nombran a la compañía eléctrica privada como la principal sospechosa del fuego que dejó a miles de personas sin hogar en Altadena, un enclave de clase media y donde vivían muchas familias latinas y negras.

Algunas de estas demandas citan un video de Instagram que muestra un fuego cercano a una de las bases de una torre de transmisión casi al mismo tiempo en que inició el incidente. Brendan Thorn, un vecino de Altadena, también indicó en una entrevista con la cadena ABC que vio llamas alrededor de las torres eléctricas que están sobre el cañón Eaton.

Edison informó el 8 de enero, al día siguiente de la ignición, que habían desactivado tres líneas de distribución al oeste del cañón para evitar que el viento provocara chispas. Esto provocó que unas 300.000 casas en Los Ángeles se quedaran sin energía en varios días de la emergencia. Las aseguradoras exigieron desde entonces a la eléctrica preservar posibles evidencias relacionadas con Eaton. Esto a pesar de que ningún departamento de bomberos ha señalado a la compañía como probable responsable.

En febrero del año pasado, Southern California Edison, la segunda eléctrica del Estado y una de las más grandes de Estados Unidos, llegó a un acuerdo para pagar 80 millones de dólares por su papel en uno de los incendios forestales más grandes de California, el Thomas, que destruyó más de 100.000 hectáreas. En 2019, otra de las grandes prestadoras de servicios del Estado, Pacific Gas&Electric, se declaró en bancarrota tras exponerse al pago de 30.000 millones de dólares en indemnizaciones porque fallos en su infraestructura provocó la chispa inicial del Paradise, el peor incendio de la entidad, con 85 víctimas mortales.

Investigación federal

El resultado de las investigaciones no llegará pronto. Los expertos han descartado que la magnitud de la devastación de los incendios sea suficiente para acelerar las pesquisas. Como prueba suele citarse el caso del fuego que arrasó con parte de Lahaina, Hawái, en agosto de 2023, y que provocó un centenar de muertes. El informe más completo sobre el incidente se hizo esperar más de un año hasta que fue publicado en septiembre de 2024 por la fiscal general de la isla.

El documento de los hechos registrados en Maui fue elaborado, en parte, por los hallazgos de los agentes de la Agencia federal de Alcohol, Tabaco, Armas y Explosivos (ATF por sus siglas en inglés). Esta elaboró el análisis forense del que ha sido el peor incendio en Estados Unidos en más de un siglo por la rápida expansión de las llamas y las ráfagas de viento que fueron registradas. Las condiciones fueron similares al infierno que sufrió California.

La ATF investiga también las causas del incendio de Pacific Palisades, que arrasó con la acomodada zona de Malibú, al oeste de Los Ángeles. El Palisades destruyó 6.800 inmuebles y causó 12 muertes, arrasando más de 9.000 hectáreas por 20 días.

Los camiones de la ATF pueden verse en la zona del incidente desde la primera semana del incendio. Después de tres semanas de investigación, los agentes han reducido sus líneas de investigación y se enfocan actualmente en dos narrativas. Que el mortal incendio del 7 de enero está relacionado con uno anterior, y más pequeño, ocurrido días antes, y que fue controlado tras cinco horas. Los bomberos que lo extinguieron se quedaron de guardia en la zona aquella noche del 1 de enero.

Los investigadores se han centrado en un elegante barrio ubicado en la cima de una de las montañas que se alzan sobre Pacific Palisades. Los medios han captado como una de las entradas a uno de los populares caminos de senderismo de la zona está clausurado con cintas de la policía. La ATF está estudiando las probabilidades de que el fuego haya sido iniciado por actividad humana. Los agentes analizan dos populares atractivos en la ruta panorámica, uno es una estatua de un buda y otra es un peñasco que asemeja a un cráneo. De momento, la agencia no descarta que el Palisades naciera después de unos fuegos artificiales, por un campamento humano o que haya sido provocado intencionalmente por algún paseante.