Dolor, incertidumbre y resistencia en el cerro de Chiquihuite: 72 horas de labores de rescate tras el derrumbe
Las autoridades reportan al menos una fallecida, tres desaparecidos y requieren la evacuación de 126 viviendas ante el riesgo elevado de otro deslave en Tlalnepantla, Estado de México
Con el dolor y el cansancio a cuestas los equipos de salvamento continúan su trabajo en la colonia Lázaro Cárdenas para rescatar a los vecinos sepultados bajo los escombros. Se han cumplido 72 horas desde que un derrumbe en el cerro de Chiquihuite aplastó al menos cuatro casas y provocó el fallecimiento de una joven en Tlalnepantla, en el Estado de México —a pesar de que en un primer momento Protección Civil confirmó dos muerto...
Con el dolor y el cansancio a cuestas los equipos de salvamento continúan su trabajo en la colonia Lázaro Cárdenas para rescatar a los vecinos sepultados bajo los escombros. Se han cumplido 72 horas desde que un derrumbe en el cerro de Chiquihuite aplastó al menos cuatro casas y provocó el fallecimiento de una joven en Tlalnepantla, en el Estado de México —a pesar de que en un primer momento Protección Civil confirmó dos muertos—, según un comunicado del Gobierno del municipio. Las autoridades de la localidad han anunciado que en estos momentos hay tres personas desaparecidas, en contra de las 10 que barajaban en origen: Paola Daniela Campos Robles, de 22 años, y sus dos hijos, Mía Mayrín Mendoza Campos, de 3 años, y Jorge Dylan Mendoza Campos, de 5 años.
El funeral de Mariana Martínez, de 21 años, la única fallecida confirmada hasta el momento, se realizó este domingo en Ecatepec, en el Estado de México. La joven era estudiante en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). La institución ha mostrado sus condolencias a la familia a través de redes sociales. Su hermana Jessica fue rescatada y se encuentra hospitalizada, según ha informado TV Azteca.
Raciel Pérez Cruz, el presidente municipal de Tlalnepantla, ha pedido a los vecinos de la colonia que abandonen la zona y acudan a los recursos de acogida habilitados ante el riesgo elevado de que se produzca otro derrumbe en el flanco oriental del cerro, de acuerdo con un análisis efectuado por el Centro Nacional de Prevención de Desastres. El informe habla de la existencia de “fracturas subverticales” y “bloques con una separación importante [algunos de hasta 10 metros de altura] que podrían poner en peligro a los habitantes de la ladera” que se encuentren en un radio de 300 metros, unas 126 viviendas a las que las autoridades ya han entregado notificaciones de riesgo.
Un 50% de los afectados ha abandonado el área. En estos momentos, el municipio cuenta con dos centros de acopio y cinco albergues en los que ya se encuentran 76 personas, según un comunicado del Gobierno de la localidad.
Sin embargo, 27 familias cuyas viviendas se encuentran dentro de la zona de peligro se han negado a abandonar sus casas, según recogió el semanario Proceso. El titular de la Coordinación Municipal de Protección Civil y Bomberos de Tlalnepantla, Hugo César Mendoza Castillo, ha añadido que “hay algunos hogares a los que tocamos y no nos responden, pero luego en las azoteas detectamos actividad de los residentes. La prioridad ahorita es la seguridad de los vecinos y los cuerpos de emergencia, por eso se han instalado cinco filtros para controlar el acceso y se reitera el llamado a que evacúen el área”.
Para facilitar las labores de salvamento, los equipos de rescate han apuntalado las rocas más grandes y susceptibles de venirse abajo con mil costales de hasta 200 toneladas. Además, mientras la misión de auxilio realiza su trabajo, ingenieros, topógrafos y técnicos especialistas en la materia vigilan que no se produzca ningún movimiento que pudiera poner en peligro la empresa. La Guardia Nacional y el Ejército se encuentran al frente de la operación, ya que se ha instalado el Plan DN-III, un operativo militar que se despliega para apoyar a la población civil en caso de desastres naturales o humanos.
La ladera del cerro de Chiquihuite está poblada por casas humildes, muchas de ellas construidas sin permisos en zonas no aptas para la edificación, donde los aludes son habituales. Los vecinos han acusado en numerosas ocasiones la falta de planificación urbanística y atención por parte de las instituciones. “Esta misma semana cayeron piedras. El martes fue. Llamamos, reportamos y no hicieron nada. Siempre es lo mismo” protestaba una de las habitantes de la colonia el viernes. Sin embargo, la situación irregular de muchos de ellos provoca que a menudo impere la ley del silencio, por miedo a ser desahuciados.
Dentro del desastre, el punto de esperanza lo ha puesto el rescate con vida de un perro por una célula de la Secretaría de la Defensa Nacional. El animal, que fue trasladado en brazos por miembros del equipo de Sedena entre aplausos de los vecinos, ha sido trasladado a la Atención de Animales Expuestos y está siendo atendido.
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