Luis Gilberto Murillo, la fórmula de Fajardo, se suma a la campaña de Petro
La periodista Mábel Lara, otra figura afrocolombiana del centro político, también anuncia su voto en la segunda vuelta por la candidatura el Pacto Histórico
Gustavo Petro, el líder de izquierda que más cerca ha estado de alcanzar el poder en Colombia, busca recuperar la iniciativa después de la primera vuelta de las presidenciales para llegar impulsado a la segunda vuelta que lo enfrentará con Rodolfo Hernández, un imprede...
Gustavo Petro, el líder de izquierda que más cerca ha estado de alcanzar el poder en Colombia, busca recuperar la iniciativa después de la primera vuelta de las presidenciales para llegar impulsado a la segunda vuelta que lo enfrentará con Rodolfo Hernández, un impredecible empresario de discurso populista. Será una intensa carrera de tres semanas. En ese propósito, la campaña del Pacto Histórico, la variopinta coalición detrás del exalcalde de Bogotá, ha obtenido este martes la adhesión del exministro de Ambiente Luis Gilberto Murillo, quien venía de ser la fórmula vicepresidencial de Sergio Fajardo, el candidato de un centro político que aún se muestra dividido con respecto a sus simpatías.
Con Petro a un lado y su candidata vicepresidencial Francia Márquez al otro, Murillo oficializó en un evento en el Congreso su respaldo “desde una perspectiva ideológica del centro” al que calificó como “un frente amplio por la paz, la democracia y la vida”. En sus palabras destacó la necesidad de encaminar esfuerzos para cuidar el ambiente, atender las regiones olvidadas de Colombia y cumplir el acuerdo de paz con la extinta guerrilla de las FARC, firmado durante el Gobierno de Juan Manuel Santos (2010-2018), del que fue ministro.
“La implementación de los acuerdos de paz tiene que ser inminente, con sentido de urgencia, con recursos, y eso debe ir acompañado del cuidado de nuestra democracia, que son los motivantes para que estemos aquí promoviendo la posibilidad de construir un país desde esa Colombia profunda”, señaló. También subrayó que la llegada de Francia Márquez a la Vicepresidencia tendría “un enorme significado histórico para las mujeres, para las comunidades de esa otra Colombia, incluidas las comunidades negras, afrodescendientes, raizales y palenqueras”. Ambos son líderes afrocolombianos provenientes de la región del Pacífico, Murillo del departamento de Chocó y Márquez del Cauca.
Cuando llegó su turno, Petro señaló que “el poder negro en la sociedad colombiana es hoy una realidad”. También recordó que se conocen desde que Murillo vivía en Washington, donde ha tejido importantes relaciones con la bancada demócrata en el Congreso. “Nos toca ver cómo enfrentamos el fracking, cómo logramos recuperar las aguas, limpiar las tierras (…) cómo se reequilibra el ser humano con la naturaleza”, señaló el aspirante presidencial con respecto a sus coincidencias.
En los márgenes, se vio a Murillo y Petro conversar sobre Andagoya, el pueblito en medio de la selva chocoana donde nació hace 55 años. La inusual biografía del exministro lo ha llevado a vivir tanto en Moscú, donde estudió becado, como en Washington, donde estuvo radicado hasta enero. “Significa para el país diversidad, inclusión, defensa de nuestra biodiversidad, el poder y potencial de las regiones, y la decencia”, le exaltó Fajardo en marzo cuando lo presentó como su segundo a bordo.
La llegada de Murillo es significativa en medio de los intensos movimientos del centro, que obtuvo menos del 5% de los votos en los comicios pero se cotiza al alza en el nuevo escenario. Este lunes, la Coalición Centro Esperanza, la plataforma que apoyó la candidatura de Fajardo y Murillo, señaló que “ha cumplido con los fines políticos para los que fue constituida”, por lo que sus miembros quedan en libertad para la segunda vuelta del 19 de junio. El domingo, Petro obtuvo el 40% de los votos y Hernández el 28%. En el juego de las adhesiones, Federico Gutiérrez, el aspirante de la derecha y tercero más votado con el 24%, anunció casi de inmediato que respaldaría a Rodolfo, como todos lo conocen. El apoyo de Fajardo, que aún no se inclina por ninguno de los finalistas, sigue siendo apetecido en una carrera muy reñida.
A la adhesión de Murillo se sumó este martes el apoyo “sin titubeos” de otra naciente figura afrocolombiana del centro, la periodista Mábel Lara, que saltó a la política de la mano del Nuevo Liberalismo. “Nací y crecí en el Cauca, una región como todas las regiones de Colombia: olvidada por la dirigencia y la clase política que durante décadas se ha elegido y no nos ha escuchado. Soy mujer, negra y de región y crecí soñando con ayudar a transformar las duras realidades que nos golpean a los ciudadanos olvidados”, escribió en una carta dirigida a Juan Manuel Galán, quien fue precandidato del Nuevo Liberalismo dentro de la coalición de centro, y a la colectividad. El partido todavía no se ha definido por ninguno de los dos candidatos sobrevivientes.
“Me formé en la rebeldía que me arruga el alma al presenciar las injusticias de la desigualdad, del machismo, del racismo y durante muchos años puse mi grano de arena desde los medios de comunicación”, prosigue la periodista, que encabezó la lista al Senado del Nuevo Liberalismo en las legislativas de marzo –que no obtuvo los votos necesarios–. “Así las cosas, he recibido el llamado de una mujer negra, de región que, como yo, ha dado la lucha de manera democrática en las urnas y me ha invitado a acompañarla. Acojo el llamado de mi amiga Francia Márquez en este importante momento de la historia y le entrego mi voto para hacerlo”, remata su carta.
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