Moda
El influjo que no cesa
CARMEN MAÑANA | Madrid
Es el póster en la habitación de cuatro generaciones de adolescentes, un símbolo de elegancia y exquisitez que no ha pasado de moda ni un solo segundo a lo largo de medio siglo de vida. Es la prostituta que, tras una noche de trabajo, ve su imagen reflejada en el escaparate de una joyería, metáfora neoyorquina de Galatea transformada.