Curas de sangre. Paul Krugman comparaba hace pocas semanas las medidas de austeridad de los Gobiernos con aquella vieja práctica médica que consistía en realizar sangrías al paciente con el objetivo de curar enfermedades, pero al final, debilitaban tanto al paciente que, a veces, le empujaban al hoyo.
El agravamiento de la crisis
"El mensaje que queremos dar es que esto no tiene buena pinta". El secretario general de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), Ángel Gurría, optó ayer por no andarse por las ramas para describir lo que espera en los próximos meses a los países desarrollados, los mismos que integran la organización que dirige.
La crisis financiera mundial ha hecho mucha mella en el empleo. España es el ejemplo más dramático. El parte, de momento, arroja cinco millones de parados, antes 1,8. Pero la factura en puestos de trabajo ha sido alta en casi todo el mundo. Cicatrizar esta herida costará mucho tiempo.
La incertidumbre ha vuelto a los mercados por culpa de los flecos sueltos de los acuerdos pactados la semana pasada en Bruselas. La falta de directrices claras sobre cómo se incrementará el Fondo Europeo de Estabilidad, unida a la nueva recapitalización de la banca y las dudas sobre la quita del 50% a la deuda griega, hicieron que las principales Bolsas europeas cerraran en negativo.
Mercados
La palabra España aparece, casi siempre, emparejada a malas noticias en el informe de resultados del tercer trimestre de Barclays. Las provisiones por las inversiones, fundamentalmente inmobiliarias, en el mercado español han vuelto a lastrar los resultados de la entidad británica.