Ningún alcalde, con independencia de su adscripción política, ha querido desperdiciar la oportunidad de realizar obras en su municipio que beneficien a personas desempleadas. La práctica totalidad de los municipios valencianos ha presentado a las correspondientes delegaciones del Gobierno sus proyectos de obras, muchas de ella de pequeña cuantía, que servirán para relanzar la economía local.
El viento causó ayer estragos: se llevó por delante ayer los techos de barracones en el colegio público Josep Camarena de Gandia y los alumnos tuvieron que ser desalojados pero no sufrieron daños. Lo mismo ocurrió con la cubierta de la piscina municipal de la misma población, que acabó dentro del agua.
"Esto es de un oscurantismo enorme y podría tratarse de un fraude". Así de tajante se mostraba Pepe Veiga, concejal socialista en el Ayuntamiento de Torrent (PP) ante las denuncias públicas que varios vecinos de la localidad han hecho al enterarse de que los pisos de vivienda protegida pública (VPP) que les había tocado en un sorteo público, en enero de 2008, han cambiado su calificación y son ahora concertados.
Gerardo Camps, vicepresidente económico del Consell, se sacó ayer de la chistera 1.020 millones de euros para financiar inversiones municipales y dotar el tercer plan de impulso económico que persigue atajar los efectos de la crisis económica que presenta la Generalitat en el plazo de tres semanas.
"Llame a la policía. He matado a mis padres". Manuel García Luján, de 31 años, atravesó ayer semidesnudo el portal de la finca en la que vivía con sus padres en Valencia, sólo con el pantalón del pijama, descalzo y ensangrentado. Faltaban diez minutos para las siete de la mañana.
ÁNGEL LÓPEZ GARCÍA-MOLINS