FRANCESC ARROYO | Barcelona
Un autobús que circule por el carril reservado al transporte público en Barcelona encontrará cada hora hasta 12 vehículos que lo ocupan sin motivo. O si se prefiere: el autobús, como promedio, tiene que sortear un obstáculo cada 1.019 metros.
La histórica sala de Barcelona Harlem, consagrada a la música en directo y especialmente al jazz, cerrará sus puertas el próximo mes de junio, tras 17 años de actividad, si no consigue apoyo público. El promotor e impulsor del local, Daniel Negro, hizo ayer en rueda de prensa el anuncio.
Pasqual Maragall puso ayer a México como síntesis y paradigma de la España plurinacional que predica. En el Orfeó Català de la capital mexicana, en el primer acto del periplo que ayer inició por este país centroamericano, el presidente catalán recordó que en el exilio había sobrevivido esa España plural a la que el franquismo quiso aplastar con la victoria militar de 1939.
Es una encuesta y sólo han respondido a ella 457 de los 946 municipios de Cataluña. Pero, a tenor de las respuestas, la sociedad de la información va ganando terreno en las prácticas de los ayuntamientos catalanes. El 51,8% de ellos tienen ya acceso a Internet a gran velocidad, mayoritariamente a través de la tecnología ADSL, según la Secretaría de Telecomunicaciones y de la Sociedad de la Información de la Generalitat.
El próximo junio puede ser el último mes de la sala Harlem de Barcelona, que lleva 17 años abierta. Lo anunció ayer Daniel Negro, su impulsor y propietario. El motivo: la falta de ayudas institucionales. "Estoy cansado", dijo, "de la falta de apoyo público a las salas que, como la mía, tienen formato reducido, programan música en directo ininterrumpidamente, cumplen un papel social y, sin embargo, están excluidas de cualquier tipo de ayuda pública que, por contra, sí reciben otros locales e instituciones que en principio son más poderosas".