La reestructuración financiera
La iniciativa de exigir unos niveles de capital excesivamente rigurosos a los bancos está despertando seria preocupación en algunos países como España, Francia y Alemania, aunque con distintos razonamientos. Estas preocupaciones contrastan con el llamamiento del presidente de la Comisión Europea, José Manuel Barroso.
Nunca es agradable recibir un balazo, pero no es lo mismo sufrirlo en el pie que en la cabeza. La postura de Francia, Alemania y España de tratar de rebajar el nivel de exigencia de capital en unas futuras (y terceras) pruebas de solvencia es un intento de esquivar un duro golpe a sus mayores entidades, al corazón de sus sistemas financieros.
El brusco aumento del paro durante este verano hace temer a algunos analistas que la economía británica se dirija de nuevo hacia la recesión. Otros subrayan el factor positivo de que ese incremento es casi exclusivamente a costa de empleos a tiempo parcial, no a tiempo completo.
La Comisión Europea quiere edificar una nueva Política Agrícola Común (PAC). Para ello en la reforma en marcha que entrará en vigor en 2014, propone cambios sustanciales en los conceptos sobre los que se apoyaba hasta ahora una política que consume 60.000 millones de euros, el 40% del presupuesto de la Unión Europa.
Las empresas eólicas están soliviantadas. Acusan al Ministerio de Industria de ahogar al sector y poner en riesgo 15.000 empleos con una nueva regulación, no negociada, que afectará al sector a partir de 2013, recortará las primas un 40% respecto a las actuales según cálculos de la Asociación Empresarial Eólica (AEE).
Mercados
Los operadores de telefonía ven como su negocio tradicional -vender minutos de llamadas y de mensajes- se les escapa de las manos. Nuevos actores están aprovechando las aplicaciones casi infinitivas que permite Internet para arrebatarle ese negocio. Las llamadas y mensajes a bajo precio (o gratuitas) de Skype o WhatsApp, respectivamente, son solo los ejemplos más señeros de esta competencia.