El agravamiento de la crisis
Volvemos a otoño de 2008. La nueva crisis del banco franco-belga Dexia ha despertado una vez más las alarmas sobre la fragilidad de algunas entidades financieras europeas y la necesidad de su recapitalización a pesar de las ingentes ayudas públicas recibidas.
La presión se redobla para Italia. La agencia de calificación de riesgos Moody's rebajó ayer la nota de la deuda soberana del país en tres escalones, desde Aa2 hasta A2, con perspectiva negativa, debido a los elevados niveles de deuda pública.
A cuatro semanas de abandonar su cargo al frente del Banco Central Europeo, Jean-Claude Trichet echa agua al impuesto sobre las transacciones financieras propuesto hace una semana por el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durão Barroso. Trichet advirtió ayer de que para tener éxito esta tasa debe ser global.
Son consejeros "por su reconocida valía". Varios exdirectivos de Novacaixagalicia se sientan en la cúpula de decenas de empresas y cobran por ello. Lo hacen como una extensión de su mandato en las antiguas Caixa Galicia y Caixanova aportando "su experiencia" -como describe Novacaixagalicia- en constructoras, telecos, consultoras o aseguradoras.
La pugna por el control de Repsol tiene un nuevo episodio. La comisión de auditoría de la petrolera solicitó ayer a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que investigue los movimientos habidos con sus acciones en los meses de agosto y septiembre.
Los accionistas de referencia del Grupo PRISA han anunciado su decisión de inyectar 150 millones en el capital del grupo, en línea con lo pactado con los bancos acreedores.
La organización Tax Justice Network, apoyada por académicos, activistas y ONG, sintetizó ayer en un índice de secretismo financiero lo que era un secreto a voces. Los aireados esfuerzos del G-20 por eliminar el blindaje de los paraísos fiscales han tenido resultados muy modestos.