Geert Wilders, líder islamófobo y populista holandés, no cabía ayer en sí de gozo. La justicia le absolvió de los cargos de incitación al odio y discriminación que se le imputaban, y él pudo presentarse como el salvador nacional de la libertad de expresión.
Pese a que el plan de retirada de Afganistán ha sido calificado como "arriesgado" por el mando militar y ha dejado cierta frustración tanto en la izquierda como en la derecha, Estados Unidos tiene por primera vez ante sí un camino preciso para la conclusión de esa guerra y un objetivo claro a conseguir.
El Ejército sirio completó ayer su reconquista de la provincia noroccidental de Idlib. Los tanques del general Maher el Asad llegaron prácticamente hasta la frontera turca, provocando que miles de sirios que habían huido de sus ciudades y habían acampado en la zona, hasta ahora libre de ataques, se refugiaran en Turquía.
Tras 16 años prófugo de la justicia, una campaña iniciada esta semana por el FBI para localizar el paradero de su compañera sentimental ha conducido a la detención del hombre más buscado de Estados Unidos: el enemigo público número uno en la lista de diez del FBI tras la muerte de Osama bin Laden, que ya porta el sello de fallecido.
El Gobierno chino aseguró ayer que el artista y disidente Ai Weiwei, liberado el miércoles por la noche después de casi tres meses en manos de la policía, "continúa siendo investigado" por delitos económicos, está pendiente de juicio y no puede salir de Pekín sin permiso durante un plazo que puede llegar a un año.