Las subvenciones que la viceconsejería de Política Lingüística concede a los euskaltegis a través de HABE (Instituto de Alfabetización y Reeuskaldunización de Adultos) estarán supeditadas desde este año al cumplimiento de un requisito de nuevo cuño.
Aunque suene a contradicción, los sindicatos también son empresas. Y como tales, con plantilla y balances, han de tener su propio convenio colectivo o, en su defecto, un pacto interno. Lógicamente estos han de ser negociados entre empleados y patronal.
Eusko Alkartasuna y PSE-EE sabían que estaban condenados a entenderse para sacar adelante la ley de Garantía de Ingresos (dependiente de un departamento de EA), con la que se pretende remodelar el actual sistema de lucha contra la pobreza.
G. GASTAMINZA | San Sebastián
Guipúzcoa se regodea exhibiendo sus mejores productos y rinde homenaje a sus autores en un multitudinario acto