La UE y Turquía sellaron ayer en Bruselas el arranque de una nueva etapa de enorme trascendencia para la paz y estabilidad de Europa y del mundo porque alumbra la probable inclusión del gran país musulmán en el proyecto común de construcción europea.
Turquía empezó a ganarse ayer su puesto en Europa con una renuncia. Con la fecha del 3 de octubre de 2005 para iniciar las negociaciones de adhesión al alcance de la mano, el primer ministro, Recep Tayyip Erdogan, tuvo que aceptar en Bruselas un "procedimiento técnico" por el que reconoce "de facto" y a regañadientes a la República de Chipre.
La polémica entre España y Polonia en torno a algunos principios básicos sobre el reparto de ayudas en la Unión ampliada quedó zanjada ayer, por el momento, al lograr el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, un acuerdo, aprobado por los 25, con su homólogo polaco, Marek Belka.
La UE expresó ayer su pleno apoyo y aprecio al secretario general de la ONU, Kofi Annan, frente al acoso que en las últimas jornadas viene sufriendo desde Washington, donde algún congresista ha llegado hasta a pedir su encarcelamiento por corrupción.
La reforma del federalismo en Alemania para agilizar los procesos legislativos fracasó por falta de acuerdo entre el Gobierno federal y los Estados federados. Las divergencias sobre las competencias educativas fueron el detonante del fracaso tras más de un año de reuniones de la comisión mixta encargada de elaborar el proyecto de reforma. "Desastre", "oportunidad única que no se repetirá en años", "provincialismo", "grotesco".
El Likud, el partido conservador del primer ministro israelí, Ariel Sharon, y el Partido Laborista de Simón Peres lograron anoche un acuerdo para el reparto de carteras que se firmará el domingo. El denominado Gobierno de unidad nacional podría ser presentado el lunes ante el Parlamento.
J. C. | Berlín
Al llegar al poder, el dictador nazi anuló la deuda contraída con la Hacienda alemana
MAURICIO VICENT | La Habana
Cuba y EE UU se 'felicitan' la Navidad con carteles de propaganda en torno a la legación de Washington
Seis personas muertas, importantes daños materiales, cientos de miles de hogares privados de electricidad y problemas en los transportes son el balance provisional del temporal de viento que sufría ayer el norte de Francia. El servicio de meteorología declaró la alerta de nivel naranja -la segunda más importante en la escala de peligrosidad- en esa zona, aunque advirtió de que comenzaría a amainar por la noche.