La campaña de las tropas de EE UU para frenar los ataques de la resistencia, intensificada desde la captura de Sadam Husein, el 13 de diciembre, no ha logrado resultados. Durante la Nochebuena y el día de Navidad, nueve personas han muerto en Erbil (Kurdistán) y en Samarra, un centenar de kilómetros al norte de Bagdad.
Las últimas esperanzas de paz han sido dinamitadas en el día de Navidad. Israel reanudó su política de asesinatos selectivos -el jefe militar de la Yihad Islámica perdió la vida ayer en Gaza-, y los grupos radicales palestinos respondieron con un atentado terrorista en Tel Aviv: cuatro muertos y una veintena de heridos.
La Loya Jirga o asamblea de notables de Afganistán, reunida desde el día 14, tiene previsto votar a finales de esta semana sobre el proyecto de la nueva Constitución afgana, pero los 502 delegados siguen sin ponerse de acuerdo sobre si el sistema que debe regir un país traumatizado por 23 años de guerras debe ser presidencialista o parlamentario.
Dos grandes explosiones causaron ayer la muerte de al menos 14 personas en la ciudad paquistaní de Rawalpindi, minutos después de que pasara por el lugar la comitiva del presidente, el general Pervez Musharraf.
Al menos 60 personas perdieron la vida ayer después de que un viejo Boeing 727 cayera al mar tras despegar del aeropuerto internacional de Cotonú, capital económica de Benin. La ministra de Sanidad, Celine Segnon, informó anoche de la existencia de 22 supervivientes.
El ex presidente yugoslavo, acusado de genocidio y crímenes contra la humanidad, se presenta a las elecciones parlamentarias serbias