Hugh Grant revive los años en los que convirtió el no hacer nada en un arte
Basada en la novela de Nick Hornby Érase una vez un padre, la última película de Hugh Grant narra la historia de un londinense que vive cómodamente sin trabajar gracias a los derechos de autor que hereda de un rancio villancico compuesto por su padre. El personaje -mujeriego, soltero, sin hijos y alérgico a cualquier tipo de compromiso- parece hecho a la medida de su estrella.