Gastronomía
Copas con vida
ROSA RIVAS | Madrid
"Una buena copa no mejora el vino. Lo que mejora es la percepción y el disfrute de quien bebe. Si lográramos transformar el vino haríamos un milagro", afirma Georg Riedel, hombre de negocios y ante todo un sibarita amante del vino. Lo que sí es un milagro para la empresa de su familia, nacida hace más de 250 años en un bosque al norte de Bohemia, es haber sobrevivido a guerras y avatares comerciales hasta convertirse en el líder mundial de la producción de vidrio.