Casi seis años y medio después de que se iniciaran las obras del trayecto Córdoba-Málaga, la capital de la Costa del Sol queda por fin conectada a la red de alta velocidad ferroviaria, lo que permitirá acortar el tiempo de viaje a Madrid a sólo dos horas y media, lo que abre un interesante abanico de nuevas oportunidades a una provincia de eminente vocación turística.
La ministra de Fomento que va a inaugurar el AVE a Málaga es malagueña y saca pecho por ello, y al PP se lo llevan los demonios. Si está convenido que el AVE es un logro de consideración histórica para Málaga y se tiene en cuenta que dentro de tres meses hay elecciones, podrá entenderse la guerra que en las vísperas de la inauguración de la línea vienen protagonizando PSOE y PP. Una pelea por puros celos.
Ni el más mínimo atisbo de conflicto. Los comités provinciales del PSOE en Sevilla, Málaga, Cádiz, Granada, Almería, Jaén y Huelva, aprobaron ayer por unanimidad las candidaturas para las elecciones generales y autonómicas del próximo 9 de marzo, caracterizadas por lo general por el continuismo, especialmente para el Parlamento andaluz.