El polvorín afgano
Afganistán sufrió ayer el peor atentado desde la caída de los talibanes en 2001 cuando un terrorista suicida se hizo explotar junto a una delegación de parlamentarios que visitaba la ciudad de Baghlan, al norte del país. Murieron al menos 50 personas, entre ellas seis diputados y varios niños, y más de un centenar resultaron heridas.
La OTAN condenó ayer "en los más duros términos" el atentado suicida en la norteña localidad de Bahglan. El ataque, que también fue condenado por los talibanes, confirma que la situación en el país asiático es más compleja de lo que parece.
La inmigración en la UE
La crisis de los rumanos empieza a convertirse en una crisis política. El proyecto de expulsión patrocinado por Romano Prodi divide a su propio Gobierno, fortalece los argumentos de la derecha, suscita reparos entre los constitucionalistas y adquiere, con los días, matices racistas
La expulsión de rumanos en Italia ha sido recibida con críticas y preocupación en Bucarest, porque la iniciativa de Roma amenaza con desatar una ola de xenofobia contra el medio millón de rumanos que vive en ese país. Pero la sensación generalizada apunta a que muchos rumanos justifican la expulsión de sus compatriotas, siempre que se trate de delincuentes.
La sombra de la Revolución de Octubre, de la que se cumplen hoy 90 años, se proyecta estos días sobre la política de Rusia y de países pos-soviéticos, cuyos dirigentes prefieren ignorar aquel acontecimiento histórico, que propicia análisis comparativos entre intelectuales.
Nicolas Sarkozy llegó ayer a Washington, en su primera visita oficial -el pasado verano almorzó en privado con la familia Bush-, asumiendo plenamente su condición de "nuevo amigo europeo de los americanos", y acompañado por su vistosa guardia pretoriana, que, a excepción del titular de Exteriores, Bernard Kouchner, la forman mujeres de distintos orígenes étnicos.