El deslumbrante exorcismo de Halle Berry
MIGUEL MORA | Madrid
Endemoniada, con los ojos extraviados, muy cachas pero bastante feúcha, el pelo como recién salido del enchufe, unas llagas espantosas en el cuerpo, pálida y desfigurada. Así de desmejorada aparece la deslumbrante Halle Berry (Cleveland, Ohio, 1966) en Gothika, película de terror dirigida por el francés Mathieu Kassovitz y ambientada en un presidio psiquiátrico.