La ola de calor ha disparado la demanda de energía eléctrica en la comunidad. La necesidad de electricidad en estos días no es tan alta como en julio, ya que estos días desciende el consumo industrial.
Las peores previsiones se hicieron realidad ayer por la tarde y los dos incendios que ardían desde el fin de semana en la zona de Sant Llorenç Savall (Vallès Occidental) se unieron en uno solo hasta formar una lengua de fuego de más de 10 kilómetros. Lo que a primera hora de la mañana parecía un incendio en fase de control, al cierre de esta edición se había convertido en una inmensa masa de fuego que mantenía desbordados a los bomberos.
La delincuencia en las calles de la capital madrileña sigue imparable y, lejos de reducirse, continúa creciendo, según los datos que manejan los jueces de Madrid. En el primer semestre del presente año se ha registrado en la capital una media diaria de 108 atracos violentos. Es decir, 10 más diarios que en el último semestre de 2002
Cinco incendios de escasa importancia se registraron ayer en otros tantos municipios de la Comunidad Valenciana. El más importante de ellos se produjo en Chelva, donde las llamas calcinaron al menos 30 hectáreas según fuentes de bomberos en el lugar y provocaron el desalojo preventivo de un albergue.
El tejido empresarial vasco está muy atomizado, con un alto predominio de las microempresas, aquéllas con menos de cinco trabajadores. Mientras casi el 90% de las compañías pertenecen a esta categoría, más de la mitad (51,75%) están compuestas por un sólo trabajador; es decir, no tienen asalariados.