Tragedia en el Ulla
XOSÉ HERMIDA | Santiago de Compostela
"¡Mira cómo viene la corriente!, ¡no te metas!", le insistían su compañero y los dos miembros de Protección Civil que los ayudaban. Pero el guardia civil José Alberto Ferreira Antón, de 30 años, ya se estaba quitando la ropa para tirarse al agua y socorrer al pescador atrapado en un islote a unos 30 metros de la orilla. Había hecho cursos de natación y, según sus compañeros, era un "tipo muy activo". Sólo aguantó unas pocas brazadas.