La Universidad Internacional Menéndez Pelayo se ha convertido para Mario Vargas Llosa en un banco de pruebas. Hace unos años entusiasmaba a sus numerosos alumnos con las historias de Flora Tristán y Paul Gauguin. Ahora, ya publicado el libro, el escritor se emociona y emociona con Los miserables, de Victor Hugo.
Aunque la cabeza real de un Ptolomeo llevaba en Madrid desde 1873, jamás había salido de "su casa", el Museo Arqueológico. Desde ayer, a la vuelta de la manzana, en la Biblioteca Nacional, en Madrid, la cabeza de granito forma parte de las casi 300 piezas de la exposición La Biblioteca Alexandrina. Homenaje a la memoria, apuesta por el futuro.
El ministro de Cultura francés, Jean-Jacques Aillagon, dijo ayer que su colega de Asuntos Sociales iba a "dar el visto bueno al acuerdo del 27 de junio", es decir, el firmado por la patronal y tres sindicatos minoritarios dentro del sector del espectáculo, que reforma el sistema de protección social.