Masones con derecho a discrepar
Por las conocidas normas de la vieja libertad, que dijo Milton, dos masones de Madrid iniciaron en 1996 una ofensiva contra las ataduras reglamentarias que, mediante expedientes, les quiso imponer la Gran Logia de España. Acusación: aparecer citados en un informe sobre la masonería publicado en EL PAÍS el 31 de marzo de 1996 y pronunciar sin permiso conferencias sobre el mismo tema en un foro universitario.