El control será más estricto
Seyla Benhabib
Politóloga estadounidense, profesora de Ciencias Políticas y Filosofía en la Universidad de Yale
“Estados Unidos continúa ejerciendo políticas que algunos empiezan a denominar de “crimi-migración”, es decir, la criminalización de la inmigración”
De repente, el mundo parece haberse hecho más pequeño, porque el virus está en todas partes; al mismo tiempo, todos estamos más separados, en la cuarentena de nuestros espacios privados. La tensión entre la interconexión y la separación se vuelve visible, más que en ningún otro ámbito, en las políticas fronterizas de los Estados y el trato que dan a los refugiados. Desde luego, se ha demostrado que la reducción de los contactos humanos era necesaria para contener el virus, pero una cosa es esa contención y otra, muy distinta, el cierre y la militarización de las fronteras, mientras que se permite que las cadenas de suministro de mercancías, por las que también puede viajar el virus, sigan funcionando. Cuando más necesidad tenían Italia y España, los demás países de la Unión Europea (UE), en lugar de ayudarles, mostraron una actitud ‘retronacionalista’, cerraron las fronteras y tardaron en empezar a enviar ayuda.
Mientras los países de la UE tienen que asumir su manifiesta falta de solidaridad interna, Estados Unidos continúa ejerciendo políticas que algunos empiezan a denominar de “crimi-migración”, es decir, la criminalización de la inmigración. No solo está infringiendo el Convenio sobre Refugiados de 1951, sino que además está rechazando a los inmigrantes cualificados que solicitan la residencia permanente en el país. El pánico causado por el virus ha servido de excusa para que el Gobierno xenófobo de Trump siga adelante con sus reprobables medidas.
¿Y qué ocurre con los refugiados que se encuentran en los campamentos de Grecia, Siria, Turquía y Jordania, qué ocurre con los rohingyas de Myanmar? Puede que el mundo decida pasarlos por alto, pero el virus, desde luego, no lo hará.
Estamos viviendo las consecuencias de un mundo interdependiente e interconectado carente de solidaridad. A corto plazo, los controles fronterizos serán más estrictos y la condición de los migrantes y refugiados empeorará. Solo una derrota de Trump en la próximas elecciones puede abrir paso a la emergencia de un nuevo tipo de multilateralismo
Créditos
Edición y Coordinación: Joseba Elola, Carmen Pérez-Lanzac, Braulio García Jaén, Carla Mascia, Andrea Aguilar, Pablo de Llano, Jorge Morla, Ángeles Lucas, Pablo León, Jesús Alborés.
Dirección de arte: Fernando Hernández
Ilustraciones: Sr. García
Fotografía: Carmen Guri y Almudena Martín
Desarrollo: Jacinto Corral
Frontend: Alejandro Gallardo
Traducciones: News Clips y María Luisa Rodríguez Tapia