La cocina a gas: tradición, control y diseño en el hogar actual
Cocinar con llama directa permite conservar técnicas tradicionales y mantener el control preciso del calor. Las cocinas a gas combinan eficiencia, seguridad y diseño para adaptarse a las necesidades de los hogares contemporáneos


Desde que el ser humano aprendió a dominar el fuego, la cocina dejó de ser una mera necesidad para convertirse en una expresión cultural. El gas sigue ofreciendo una herramienta versátil que permite regular con rapidez la temperatura, lo que resulta fundamental en preparaciones que exigen precisión, como sellar carnes, saltear verduras o reducir salsas. Algunas técnicas culinarias, como el sofrito de una paella o el flameado de ciertos postres, dependen del contacto directo con la llama para conservar su autenticidad.
La elección de una cocina debe responder a criterios funcionales y estéticos. En departamentos pequeños o cocinas integradas al living, una encimera resulta práctica y estética, liberando espacio; en cambio, en casas con cocinas amplias, una cocina a gas de 5 o 6 quemadores permite preparar varias recetas al mismo tiempo, ideal para familias numerosas o quienes disfrutan de recibir invitados.
Si disfrutas de la cocina tradicional, donde el control del fuego es clave, una cocina a gas con quemadores de distintas potencias te permitirá ir de un hervor lento a un salteado intenso en segundos. Por otro lado, para quienes cocinan de manera rápida y sencilla, basta con un modelo compacto de 4 quemadores que combine practicidad con eficiencia.
El uso del horno también influye en la decisión. Los aficionados a la repostería o al pan artesanal buscan hornos con buena distribución del calor o sistema de convección. Para usos esporádicos, bastan modelos sencillos, fáciles de limpiar y con funciones básicas. En términos de seguridad, conviene optar por cocinas con encendido eléctrico y válvulas que cortan el gas si la llama se apaga. Las parrillas de hierro fundido o acero aportan estabilidad y mayor durabilidad.
El diseño también desempeña un papel clave. Los acabados en acero inoxidable ofrecen resistencia y una imagen contemporánea. Los modelos en blanco o negro se integran mejor en ambientes clásicos o minimalistas.
La cocina, como espacio funcional y de encuentro, refleja también un modo de vida. El sonido del aceite al calentarse, el aroma de la cebolla dorándose y el azul de la llama son parte de una experiencia que conecta con los sentidos y la memoria. El gas permite conservar técnicas heredadas sin renunciar a las ventajas de la tecnología. Pensar en renovar la cocina es, en última instancia, reflexionar sobre cómo se quiere cocinar y compartir. Jornadas de descuentos como el Cyber Monday de Easy pueden facilitar el acceso a modelos que combinan tradición, diseño y eficiencia.