La morosidad cae más de un punto en un solo mes y baja al 6,80% en marzo

a su nivel más bajo desde junio de 2011, según los datos provisionales publicados el lunes por el Banco de España.

La caída se debió, en su mayor parte, al importante recorte de más de 12.700 millones de los créditos impagados, que quedaron en 83.293 millones de euros, una cantidad que no era tan baja desde marzo de 2009, según los mismos datos.

Los créditos que todas estas entidades tenían concedidos a cierre de marzo también cayeron, aunque de forma menos contundente, ya que el "stock" sumaba 1,224 billones frente a los 1,229 billones del mes anterior.

Los expertos de XTB destacan que la caída de la mora tiene especial importancia dado que se produce "en un contexto en el que el crédito vivo no está creciendo", y añaden que, de seguir así la tendencia, la mora podría cerrar el primer semestre cerca del 7,4 %, lo que sería "síntoma

inequívoco" de la recuperación de los balances de las principales entidades españolas.

La positiva evolución de la morosidad se nota aún más en comparación con el mismo mes del año pasado, cuando era dos puntos porcentuales más elevada y se situaba en el 8,83 %.

Aunque los impagos aún son cuantiosos, van mejorando poco a poco al compás del desendeudamiento de familias y empresas y de la mejora de la economía y el empleo, con lo que el ratio se aleja cada vez más del máximo histórico del 13,61 % alcanzado en diciembre de 2013, pese a lo que ha empeorado en varias ocasiones puntuales.

Asimismo, desde XTB consideran que "el contexto actual de mejora económica, mayor demanda para el consumo y menor desempleo pueden animar a los bancos a relajar las condiciones de concesión de crédito", lo cual podría aumentar el saldo de crédito vivo y provocar que la rebaja en

la tasa de morosidad "se acelere".

Pese a la mejora de la situación, el Banco de España pidió recientemente a las entidades financieras que continúen recortando la mora, que aceleren la venta de activos inmobiliarios y aumenten su rentabilidad, para lo que les animó a buscar fuentes alternativas de ingresos y reducción de costes.

En el informe anual de 2017 publicado el pasado 22 de mayo, Linde también recomendó a las entidades que aumenten su inversión en innovación, ya que la competencia se endurecerá por la irrupción de nuevos proveedores de servicios bancarios y consideró "clave" que se superen estos retos y la banca alcance una fortaleza suficiente para contribuir al crecimiento

económico y la creación de empleo.

Volviendo a los datos, la morosidad agregada del sector de bancos, cajas y cooperativas, que el Banco de España presenta separada de la de los establecimientos financieros de crédito (EFC), se situó en marzo en el 6,81 %, también mucho mejor que el 7,86 % de febrero, después de que los dudosos se redujeran hasta los 79.718 millones desde los 92.468 millones de febrero.

En comparación con marzo de 2017, la mejora fue de algo más de dos puntos porcentuales, ya que entonces el porcentaje fue del 8,83 %.

Los tres tipos de entidades sumaban a cierre de marzo un volumen de impagos de 79.718 millones de euros, para una cartera total de 1,170 billones de euros en créditos, también inferior a los 1,175 billones de febrero.

En tasa interanual, la deuda impagada a bancos y cajas se había reducido en casi 27.200 millones de euros, mientras que el crédito bajaba de 1,207 a 1,170 billones.

Por último, los establecimientos financieros de crédito (EFC), que financian la compra de grandes bienes de consumo, terminaron el mes de marzo con una mora del 5,96 % muy similar a la del mes anterior, debido al incremento de la cartera crediticia y también de la dudosa.

En concreto, el "stock" de créditos de estas entidades se situó en 46.031 millones de euros frente a los 45.357 millones anteriores, igual que los impagados, que se elevaron a 2.744 millones desde los 2.718 millones de febrero.