Mal entendida, la Navidad es solo un conjunto de normas universales. Familia y amor por un lado. Beber, comer y gastar demasiado por el otro. La cuestión es cómo llegar hasta ahí sin perder la cabeza. Si les ayuda, aquí tienen una serie de guías sobre cómo resolver pequeñeces en estas fiestas para que, al final, termine importando solo aquello que es importante