La arquitectura totalmente eléctrica del Ford Mustang Mach-E, con unas baterías colocadas longitudinalmente en la parte interior del chasis para maximizar la estabilidad así como la amplitud del vehículo, ha batido todos los récords de velocidad hasta la fecha: una aceleración de cero a 100 en 3,7 segundos, autonomía de hasta 610 kilómetros y una carga rápida de 119 kilómetros en tan solo diez minutos. “De lo que se trata al final es de tener las mismas sensaciones que tenías antes, pero con la mayor sostenibilidad y avances posibles”, apunta Quim Gutiérrez sobre la revolución eléctrica en la conducción.
El sistema eléctrico del nuevo Mustang Mach-E –disponible tanto en autonomía estándar (con batería de ion-litio de 75,7 kWh) como en autonomía extendida (con batería de 98,7 kWh)–, se carga de forma tan sencilla como un teléfono móvil. Basta conectar el cable de carga universal de Ford a un enchufe cualquiera de nuestra casa. Otra alternativa más rápida es el cargador Ford Connected Wallbox, un punto de carga opcional para el hogar que carga la batería por completo durante la noche. Además, desde la aplicación FordPass, permite gestionar los horarios de carga para tenerlo siempre a punto.
“A un coche lo que le pediría ahora mismo es un cambio muy necesario, el de la sostenibilidad. Que sea lo menos contaminante posible y favorezca que las carreteras por las que tenemos que conducir sigan rodeadas de árboles y sean transitables”, reconoce el actor. El nuevo Mustang Mach-E pone fin a los viajes a la gasolinera e incluye cinco años de acceso a la red de carga FordPass, con más de 155.000 puntos de carga públicos distribuidos por toda Europa, así como a la red de carga de alta velocidad IONITY, con más de 400 ubicaciones europeas. Mediante el sistema de navegación, FordPass localiza todas esas estaciones para planificar nuestra ruta y comenzar una apasionante aventura sin dejar ni rastro por camino.