EL PAÍS

En la piel de un refugiado: Latinoamérica

Empezar de cero

Piensas en tu hija, en el riesgo de que pueda pasarle algo, y decides que tenéis que salir inmediatamente. Ir a España es lo más rápido y seguro: no necesitas visado y tienes algunos conocidos allí que pueden ayudarte. Le dices a tu hija que tenéis que hacer las maletas. Ella te pregunta qué va a ser de vosotras cuando lleguéis a vuestro destino. Por un momento, dudas. Estáis solas, vais a abandonarlo todo y a empezar de cero. Te duele la perspectiva de arrancarla de su entorno.