En la piel de un refugiado: Latinoamérica

Una segunda oportunidad

Llegas a España, donde te acogen unos familiares. Has perdido todo por lo que tanto habías luchado. Tratas de encontrar trabajo. Tras unos meses, entras en contacto con una asociación en la que te explican que tienes derecho a pedir asilo. Eso te convertiría en refugiada. Les cuentas tu historia y la de tu hija, lo que le ocurrió a tu hijo, al que no olvidas. Te dicen que es complicado conseguirlo, pero lo vas a intentar.