¿Por qué tu abuelo es más ecológico que tú?
El proyecto ‘Terceros en edad, primeros en reciclaje’ acerca la tarea de reciclar a través de actividades lúdicas y terapéuticas a 247 centros de mayores de cuatro comunidades autónomas
El futbolchapas es algo serio. Tiene reglamento oficial y se juega con tapones usados y chapas de envases de vidrio. Al rummy, un juego en el que se usan cartas o fichas, también se puede echar una partida con desechos. Esa es al menos la idea que tiene en mente Joaquín Mata, un usuario del centro de participación activa Zona Sur, en Logroño. Quiere crear las fichas con envases de plástico. Forrarlas bien para que aguanten y ponerles números. “Ahora estoy de vacaciones. Bueno, todo el año en realidad”, ríe este burgalés, de 69 años, afincado en Logroño desde hace 35. “Pero a partir de septiembre, que ya estamos todos con las pilas cargadas, se lo voy a proponer a la dirección”, afirma. El lugar al que acude cada día forma parte del programa Terceros en edad, primeros en reciclaje, una iniciativa de Ecoembes que busca acercar el reciclaje a los mayores. Desde que se lanzara hace un año, 247 centros han participado y más de 327.000 mayores han tomado parte en La Rioja, Cantabria y Asturias. Aragón se acaba de incorporar.
La implicación de Mata es máxima. No se pierde un taller. Es más, tiene la categoría de voluntario por todo lo que ayuda. Asiste a sus compañeros en cuestiones de informática, ha dado clases de reciclaje a los chavales del colegio de al lado y por supuesto enseña a jugar al rummy, de origen incierto y que tiene una versión con cartas. "Me encantan las manualidades y contar a la gente lo que hacemos en el centro", explica. El programa de Ecoembes imparte nociones básicas de reciclaje como la elección del contenedor adecuado y fomenta la reutilización de envases. Mata ha fabricado lámparas con papel reciclado, cuadros con plástico, zancos con latas y pelotas para tirarlas en las casetas de la feria. "Llevamos tiempo haciendo cosas guapas", cuenta sin darse importancia.
Reforzar el autoestima
Uno de cada cinco ciudadanos tiene más de 65 años, según el Instituto Nacional de Estadística. Y en algunas regiones envejecidas la proporción se convierte en uno de cada cuatro. "Los mayores son muy ecológicos. En su época no había tanto consumismo", afirma Eva Arango, trabajadora social del centro de día de Luarca (Asturias). Con la colaboración de los gobiernos regionales, los técnicos de Ecoembes se desplazan a los centros e imparten charlas gratuitamente a empleados y usuarios. "No podemos dejar a los mayores fuera de una tarea tan importante como el reciclaje. Al contar con ellos se les refuerza el autoestima", añade Arango, que atienda a una treintena de mayores al día para que mantengan sus capacidades.
Las actividades que se organizan tienen un componente lúdico para facilitar la concienciación. El centro de día General Dávila, en Santander, organizó un concurso llamado la ruleta del reciclaje en el que los usuarios tenían que relacionar fotografías con colores. "Se sienten orgullosos de ser un ejemplo", explica su directora Rosaura González. "Los mayores son embajadores de la vida en todos los sentidos", ilustra esta trabajadora social, que junto con otras seis compañeras atiende a 30 mayores en este centro, abierto 361 días al año.
Algunas de las manualidades que los usuarios fabrican en los talleres son juegos pensados para las jornadas intergeneracionales con niños. "Se convierten en transmisores de conocimiento", abunda Arango, que anuncia la utilización paulatina de limpiadores naturales en lugar de productos tóxicos en otra muestra de compromiso con el medio ambiente.
Ecoembes provee a los centros de cubos de colores para el reciclaje de envases y papel y cartón. “El simple hecho de aplastar una botella para optimizar el espacio del contenedor es una actividad muy útil para ellos”, afirma González. El programa incluye visitas a plantas de tratamiento de residuos y salidas para retirar basuraleza (los residuos abandonados en el medioambiente) de entornos naturales. Ecoembes sienta las bases, proporciona información y fomenta algunas actividades lúdicas y terapeutas relacionadas con el reciclaje. Los centros libremente las desarrollan y las amplían. “Tengo varias ideas para después de verano”, afirma Mata, uno de los más activos del centro de Logroño. “Nosotros también nos reciclamos”, bromea. Los jugadores de rummy están de suerte.
