“La asesoría jurídica es primordial, aunque los recursos sean limitados”

ASESORÍA FISCAL

Hace tres décadas, Adolfo Jiménez (Belmonte, 1955) inauguró Firenzia, una pequeña asesoría fiscal y correduría de seguros. Desde entonces, sabe que el cuidado de los datos de sus clientes, empleados y proveedores es un asunto serio. “Nadie quiere una multa”, dice este microempresario, que en los últimos años ha puesto en forma a su negocio para adecuarlo al nuevo reglamento de protección de datos. “En 2018 nos volvíamos locos con todas las comunicaciones y consentimientos que teníamos que enviar”, arguye el dueño de esta pequeña firma ubicada en el distrito madrileño de Ciudad Lineal, con 12 empleados y 200 clientes.

Pero poner al día el negocio no fue un paso en solitario. “Nos acercamos a un despacho de asesoría jurídica que nos ha ayudado al manejo de los datos”, comenta Jiménez. “A pesar de que los recursos de las pequeñas empresas sean limitados, siempre es importante contar con un experto que te oriente”, advierte.

"Hoy, nuestros clientes están más tranquilos porque saben que cuidamos sus datos en todo momento”

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