Por qué cuidar el planeta ayuda a crecer a empresas e inversores
Por qué cuidar el planeta ayuda a crecer a empresas e inversores
El pacto mundial alcanzado hace ahora seis años en el Acuerdo de París busca limitar el aumento de la temperatura del planeta a 1,5 grados centígrados. La medida reducirá de manera considerable los riesgos y el impacto del cambio climático. Por eso, la transición hacia una economía de cero emisiones netas presenta una oportunidad de inversión histórica.
Los datos demuestran que las empresas que cuentan con una estrategia a largo plazo bien articulada, y con un plan claro para abordar la transición hacia las cero emisiones netas, son una oportunidad de inversión. Inspiran seguridad y confianza ante el desafío de acometer la transformación global de sus negocios, lo que se traduce en una prima de sostenibilidad para estas compañías y para los inversores que apuestan por ellas. “El año pasado, el 81% de los índices sostenibles batieron a los índices de referencia tradicionales”, señala Aitor Jauregui, el responsable de BlackRock para España, Portugal y Andorra, Aitor Jauregui.
Larry FinkFundador y CEO de BlackRock
Larry FinkFundador y CEO de BlackRock
Nacida hace tres décadas en Estados Unidos y presente en más de 30 países, BlackRock es una corporación especializada en la gestión de activos financieros y en crear soluciones de inversión. Desde su creación, su objetivo ha sido ayudar a sus clientes a conseguir un mayor bienestar y seguridad financiera. Consciente de que la sostenibilidad es un factor que tiene un efecto positivo –para sus inversores y las empresas– que se refleja en la cuenta de resultados, BlackRock pone especial hincapié en su interacción con las empresas en las que invierte en nombre de sus clientes, lo que se denomina “inversión responsable” (en el argot, Investment stewardship).
1988 Fundación en Nueva York
Ocho personas, entre ellos Larry Fink y Rob Kapito, fundan BlackRock en Nueva York.
1994 BlackRock llega a España
La compañía instala sus oficinas en Torre Picasso, en el centro financiero de Azca (Madrid).
1999 Nace Aladdin, su plataforma tecnológica
La compañía cotiza en la Bolsa de Nueva York. Ese año comercializa su tecnología propia, Aladdin. Es una de las palancas clave en el camino hacia el objetivo de cero emisiones.
2000 Avances en la digitalización
Nace BlackRock Solutions, la filial proveedora de tecnología.
2006 Presencia en nuevos mercados
Compra de Merrill Lynch Investment Management, lo que amplía su presencia internacional.
2008 Compromiso con la ONU
En plena crisis financiera, BlackRock se adhiere a los Principios de Inversión Responsable impulsados por Naciones Unidas.
2009 Incorporación de las inversiones indexadas
Con la compra de Barclays Global Investors, incorpora los ETFs (fondos cotizados) de iShares a su oferta. Se convierte en el mayor gestor de activos del mundo.
2014 Primera carta de Larry Fink
Larry Fink se dirige a los consejeros delegados pidiendo que las empresas tengan un propósito con la sociedad.
2017 Promoción de inversiones responsables
Apuesta por la inversión responsable (Investment stewardship), promoviendo aquellas prácticas de gobierno corporativo que puedan tener un impacto financiero a largo plazo, así como usando su voto en el interés de los inversores.
2018 Operaciones con inteligencia artificial
Puesta en marcha de AI Lab, para acelerar el uso de la inteligencia artificial.
2019 Nuevo paso en las inversiones alternativas
Lanzamiento de BlackRock Retirement Solutions Group y compra de eFront, el principal proveedor mundial de software para la gestión de inversiones alternativas.
2020 La sostenibilidad como estándar de inversión
El grupo sitúa la sostenibilidad en el centro de su estrategia y de todas sus operaciones.
BlackRock llegó a España en 1994. En su oficina en Madrid hoy trabajan 30 personas que dedican sus esfuerzos a acercar las inversiones a toda la población a través de sus principales clientes: las entidades financieras del país. El objetivo es ayudar a cualquier persona a construir ahorros para toda la vida y poder invertirlos de una forma sencilla y económica, dando el paso de ahorrador a inversor. “Pretendemos que la actividad que desempeñamos tenga trascendencia en el tiempo, y tenemos un propósito muy claro: queremos ayudar cada vez a más gente a conseguir un bienestar financiero. Para ello, dedicamos muchos esfuerzos en torno a la necesidad de reforzar la educación financiera y en el beneficio de invertir a largo plazo”, admite Aitor Jauregui.
Además, las inversiones de BlackRock tienen un impacto positivo en el país: la gestora invierte el dinero de sus clientes en empresas de todo tipo y tamaño ayudando a esas compañías a crecer y a crear puestos de trabajo, lo que a su vez permite que las economías y las sociedades prosperen. Además, BlackRock participa en distintas iniciativas sociales y colabora con diversas ONG, como Generation, para combatir el paro juvenil en nuestro país. “La componente social es tremendamente importante para nosotros”, indica Jauregui.
Fondos sostenibles disponibles para los inversores españoles
Nuevos productos registrados en España en 2020
Hogares españoles alimentados por un parque eólico marino en el que invierte BlackRock
Fuente: BlackRock, septiembre 2021.
Las estrategias de inversión sostenible en el mundo recibieron casi 400.000 millones de dólares en 2020. Este esfuerzo financiero ayudará a combatir las emisiones de CO2
BlackRock integra factores medioambientales, sociales y de buen gobierno corporativo (ASG o ESG, por sus siglas en inglés) en todos sus procesos de inversión, con el fin de crear un impacto positivo en las empresas y en sus inversores.
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Todo lo relacionado con el medioambiente (desde la energía que consumen las empresas, los residuos que genera, los recursos que necesita, sus emisiones de CO2, su compromiso con la biodiversidad…).
Las relaciones que tiene la empresa con las personas e instituciones de las comunidades en las que hace negocios. Estos criterios incluyen las relaciones laborales, la diversidad y la inclusión.
Es el sistema interno de prácticas, controles y procedimientos que una empresa adopta para gobernarse a sí misma, tomar decisiones eficaces, cumplir la ley y satisfacer las necesidades de las partes interesadas externas.
Cuando BlackRock posee acciones de una empresa en nombre de sus clientes, puede interactuar e involucrar al equipo directivo en temas clave relacionados con las buenas prácticas de gobierno corporativo, incluidas la gestión de factores medioambientales y sociales que pueden tener a largo plazo importantes implicaciones económicas, operativas o para la reputación de la empresa.
Los efectos del crecimiento descontrolado también se traducen en términos financieros, ya que empeoran cada vez más la calidad del empleo, sobre todo el femenino
La Conferencia sobre el Cambio Climático (COP26) que se acaba de celebrar en Glasgow compromete a todos los actores, entre ellos BlackRock, a cumplir con los Acuerdos de París 2015 sobre el cambio climático, que pretenden rebajar 1,5ºC la temperatura del planeta antes de 2050. El cumplimiento de esta premisa, sumado a la transición hacia una economía de cero emisiones netas, va a ser un punto de inflexión para determinar si una empresa supone una oportunidad de inversión o es un riesgo.
El riesgo climático es una amenaza para cualquier inversión. Por eso, todo el sector financiero debe ayudar a aquellas compañías que estén más rezagadas a avanzar hacia esa posición de cero emisiones netas para 2050.
Aitor JaureguiResponsable de BlackRock para
España, Portugal y Andorra
Aitor JaureguiResponsable de BlackRock para
España, Portugal y Andorra
Para BlackRock, es fundamental que fluya cuanto antes capital hacia los países emergentes –excluyendo China–, responsables del 30% de las emisiones y los que más sufren los efectos físicos del cambio climático. Para conseguirlo, la compañía se ha unido a Climate Finance Partnership, un gran fondo para atraer inversiones hacia estos lugares y acelerar su lucha contra el calentamiento del planeta.
En la COP26, BlackRock también respaldó los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de Naciones Unidas como un marco más para poder evaluar los riesgos de inversión de una compañía. “Vemos progresos, pero pedimos que las empresas sigan adaptando sus modelos a posiciones alineadas con los objetivos climáticos que llevamos impulsando durante los últimos años”, remacha Jauregui.
BlackRock trabaja desde hace tiempo con clientes institucionales para invertir en infraestructuras de renovables por todo el mundo, lo que ha impulsado su expansión
Capital en riesgo. El valor de las inversiones y los ingresos procedentes de las mismas pueden bajar o subir y no están garantizados. Es posible que los inversores no recuperen el importe invertido inicialmente. La rentabilidad pasada no es un indicador fiable de los resultados actuales o futuros y no debe ser el único factor a tener en cuenta a la hora de seleccionar un producto o estrategia. Las variaciones de los tipos de cambio entre las monedas pueden hacer que el valor de las inversiones disminuya o aumente. La fluctuación puede ser especialmente marcada en el caso de un fondo de mayor volatilidad y el valor de una inversión puede caer repentina y sustancialmente. Los niveles y la base imponible pueden cambiar de vez en cuando.
En el Espacio Económico Europeo (EEE): está emitido por BlackRock (Netherlands) B.V. está autorizado y regulado por la Autoridad de los Mercados Financieros de los Países Bajos. Domicilio social Amstelplein 1, 1096 HA, Amsterdam, Tel: 020 - 549 5200, Tel: 31-20-549-5200. Registro mercantil nº 17068311 Para su protección, las llamadas telefónicas suelen ser grabadas.
Cualquier investigación que aparezca en este documento ha sido obtenida y puede haber sido utilizada por BlackRock para sus propios fines. Los resultados de dicha investigación se ponen a disposición sólo de forma incidental. Las opiniones expresadas no constituyen un asesoramiento de inversión ni de ningún otro tipo y están sujetas a cambios. No reflejan necesariamente los puntos de vista de ninguna empresa del Grupo BlackRock ni de ninguna parte del mismo y no se garantiza su exactitud.
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