Seguimos limpiando el mundo… y lo que nos queda

No me digas que no tienes plan para este próximo sábado 18 de septiembre. El mundo entero se moviliza para liberar el espacio y la naturaleza de objetos indeseados como la basura abandonada. Si no hay previsto un evento cerca de tu casa (en España constan solo 19), siempre puedes crearlo siguiendo los 13 consejos de los organizadores y promocionarlo en la web del World Clean Up Day, el Día de la Limpieza.

Este año son 180 países los que se dan cita para liberar al planeta de desechos. Se espera la participación de millones de voluntarios y la esperanza tiene fundamentos sólidos. En el 2018 se reunieron simultáneamente 18 millones de personas en 157 países en lo que resultó ser el mayor evento de limpieza global de la tierra jamás registrado. Durante 36 horas sin parar fueron sucediéndose los grupos de personas que limpiaban primero en Nueva Zelanda para atravesar el ancho globo y acabar el día y la limpieza en las islas Hawai.

Este año son 180 países los que se dan cita para liberar al planeta de desechos no deseados

En el 2019 se superó el listón: más de 21 millones de personas en 180 países recogieron más de 100.000 toneladas de desperdicios y, en el 2020, a pesar de la pandemia y el confinamiento, más de 11 millones de voluntarios acudieron puntuales a la cita por la higiene del planeta.

Este año el evento me pilla en una nueva ciudad, donde nos mudamos con mi familia a mitad del verano. En Francia es muy potente el movimiento asociativo y los poderes públicos se apoyan a menudo en ellos. A principios de septiembre cada municipio monta un forum de las asociaciones para que los residentes habituales y sobre todo los sobrevenidos conozcan el mundillo asociativo y puedan encontrar las actividades (deportivas, culturales, sociales) que les interesan.

Asistí con la esperanza de encontrar un colectivo que congregara a las personas para limpiar el entorno no solo una vez al año sino de manera periódica. Y me topé con lo que buscaba. Se llama Consciensce et impact ecologique (CIE, conciencia e impacto ecológico, en español), y se presenta como una asociación de educación popular para la transición ecológica con base en Lyon y con varias antenas por toda la región.

En el 2020, a pesar de la pandemia y el confinamiento, más de 11 millones de voluntarios acudieron puntuales a la cita por la higiene del planeta

CIE organiza eventos y formaciones en todo tipo de establecimiento escolares, empresas o para grupos de particulares. Y son conocidos en la región por organizar “recogidas colectivas de colillas”. Según cuentan, una sola colilla puede contaminar hasta 500 litros de agua. El cálculo del daño causado al agua es monstruoso si tenemos en cuenta que cada año se tiran al suelo 30.000 millones solo en Francia. En un solo evento de recogida organizado en Lyon durante un día y en el que participaron 90 voluntarios llegaron a recuperarse más de 170.000.

Para este próximo sábado y en mi ciudad, Chambéry, CIE invita los ciudadanos a recoger basura en general durante la mañana. Voy a aceptar la invitación para contribuir ―no con mi granito de arena, sino, en este caso, con mis dos manitas y mi bolsa de basura― a que mi nueva ciudad se limpie un poco la cara.