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El Congreso peruano suspende al legislador Kenji Fujimori

El congresista, hijo del expresidente Alberto Fujimori, queda inhabilitado mientras se le investiga por el escándalo de compra de votos

Kenji Fujimori durante la sesión que votaba retirarle la inmunidad.
Kenji Fujimori durante la sesión que votaba retirarle la inmunidad.Ernesto Arias (EFE)

Kenji Fujimori, el hijo menor del autócrata peruano Alberto Fujimori, ha sido suspendido la noche del miércoles de sus derechos y deberes como congresista en una votación que condujo la mayoría opositora fujimorista y que no respetó el reglamento del Congreso de Perú. El legislador es investigado por una escándalo de compra de votos en el parlamento. Además, desde hace meses protagoniza un enfrentamiento con su hermana mayor Keiko, quien lo apartó del partido que lidera, Fuerza Popular.  

Con el menor de los Fujimori también fueron suspendidos otros dos congresistas fujimoristas disidentes: Guillermo Bocángel y Bienvenido Ramírez. Los tres negociaron votos con otros parlamentarios para evitar la destitución de Pedro Pablo Kuczynski, el presidente que fue orillado a renunciar en marzo al conocerse las negociaciones ilegales. 

En marzo, uno de los congresistas de la mayoría parlamentaria de Fuerza Popular, Moisés Mamani difundió videos, grabados con cámara escondida, en los que los fujimoristas disidentes ofrecían cargos públicos y presupuesto del Ejecutivo para obras de infraestructura, siempre y cuando no asistieran a la votación de la destitución de Kuczynski, o votaran por la abstención. En las imágenes figuraba uno de los ministros del Gabinete, Bruno Giuffra, entonces ministro de Transportes y Comunicaciones. A cambio, Kenji Fujimori logró de Kuczynski el indulto humanitario para su padre, liberado el 24 de diciembre, cuando cumplía la mitad de una condena de 25 años de prisión, impuesta por crímenes de lesa humanidad cometidos cuando era presidente, entre 1990-2000.

Este miércoles, el pleno del Parlamento debatió en una sesión del pleno dos cuestiones: si había lugar a plantear una causa contra los políticos Fujimori, Bocángel y Ramírez por haber cometido cohecho y tráfico de influencias y la suspensión de los derechos y deberes como parlamentarios mientras dure el proceso penal.

Según la Constitución y el reglamento del Congreso, cuando una acusación constitucional para separar o desaforar congresistas ha sido votada en la Comisión Permanente, los miembros de dicha instancia ya no pueden votar en el Pleno la cuestión. Sin embargo, el presidente del Congreso, Luis Galarreta, de Fuerza Popular, hizo una interpretación de la ley y permitió votar a los miembros de la Comisión que no asistieron en aquella ocasión.

Los miembros de otras bancadas políticas reclamaron que el presidente del Legislativo no informó cuál era el quórum que estaba considerando para la votación y que si restaba a los miembros de la Comisión Permanente, necesitaría un número mayor de votos para que procedieran las sanciones.

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La suspensión de Kenji Fujmori obtuvo 61 votos a favor, cuatro en contra, y seis abstenciones. El Congreso tiene 130 miembros.

“Felicitaciones, aquí tienes mi cabeza en bandeja”, dijo el hermano menor de Keiko Fujimori dirigiéndose a la líder de Fuerza Popular, a través de la prensa, al final de la sesión que duró unas ocho horas. “Lo que se ha vivido es nauseabundo, se ha violado la ley, la Constitución. La norma dice que para convocar a los congresistas accesitarios tiene que haber una sentencia firme”, añadió. El hijo menor del autócrata añadió que la “mayoría aplastante” quería evitar que él ocupara un cargo en la mesa directiva del Congreso, que cambiará en julio.

Noche negra

El congresista del partido oficialista Peruanos por el Kambio (PPK), Juan Sheput, quien no suele confrontar al fujimorismo, comentó al final de la sesión que el presidente del Congreso “nunca quiso decir cuánto era el quórum para determinar la proporción en cada una de las mociones” votadas este miércoles.

En la votación de si había lugar a la formación de causa contra los congresistas, se requerían la mitad de los votos más uno, y en la votación de la suspensión de los deberes y derechos, eran necesarios dos tercios de los votos.

“(El partido) Peruanos por el Kambio está dispuesto a defender la gobernabilidad, pero imponer un razonamiento absurdo no tiene cabida en los antecedentes parlamentarios. Queremos deslindar firmemente con este tipo de acciones: es una negra noche para el Parlamento”, manifestó.

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