Rusia propone una resolución "breve" de alto el fuego si se mantienen las diferencias en la ONU
EE UU ve "con interés" la propuesta de Líbano de desplegar 15.000 soldados al sur del país
Rusia ha propuesto adoptar una resolución "breve" de alto el fuego en en el seno del Consejo de Seguridad de la ONU si se mantienen las diferencias entre las partes implicadas en la guerra de Líbano. Moscú alude a "razones humanitarias" para adoptar un texto intermedio que muestre "la voluntad política" de parar el derramamiento de sangre a ambos lados de la frontera entre el país árabe e Israel. EE UU, por su parte, asegura que ve con interés la propuesta libanesa de desplegar 15.000 soldados de Beirut en el sur del país.
Moscú, uno de los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, asegura que "si se mantienen las divergencias es necesario dar un paso intermedio y adoptar una resolución breve para declarar un alto el fuego humanitario".
A través de un comunicado, el viceministro de Asuntos Exteriores ruso, Andréi Denisov, ha asegurado que se deben tener en cuenta las objeciones presentadas por Líbano a la propuesta de Francia y Estados Unidos, que no contempla la retirada del ejército de Israel de territorio libanés.
A juicio de Moscú es importante que el texto cuente con el respaldo de todas las partes para "no agravar la frágil situación" que se vive en Líbano.
Por su parte, el portavoz del Gobierno de EE UU, Tony Snow, ha declarado que la Casa Blanca se muestra "interesada" por la propuesta de Líbano de desplegar 15.000 soldados de su ejército en el sur del país, aunque ha añadido que en su caso esta decisión debería ir acompañada de un despliegue de una fuerza internacional de apoyo a las tropas libanesas. Snow ha hablado en Crawford, Texas, donde descansa el presidente del país, George W. Bush.
Delegación de la Liga Árabe
La actividad diplomática se concentra en Nueva York, adonde acudirá una delegación de la Liga Árabe para apoyar a Líbano, encabezada por su secretario general y varios ministros de exteriores árabes.
Al término de la reunión extraordinaria que mantuvo esta mañana la Liga, el primer ministro libanés, Fuad Siniora , explicó que los ministros árabes de Exteriores han expresado su "apoyo total" al plan de su Gobierno de siete puntos, muy distinto al borrador de resolución presentado por Francia y EE UU, ya que pide la retirada total del ejército israelí y el alto el fuego inmediato.
Siniora ha indicado que la Liga le dirá al secretario general de la ONU, Kofi Annan, y al Consejo de Seguridad que no deben tomarse decisiones "inaplicables sobre el terreno y que no tomen en cuenta los intereses de Líbano, su unidad y su estabilidad".
"Lo antes posible"
El presidente de EE UU, George W. Bush, afirmó ayer que su país buscará que el Consejo de Seguridad de la ONU apruebe cuanto antes una resolución para poner fin a los combates y bombardeos en Israel y Líbano. "Trabajaremos con nuestros socios para conseguir que la resolución se presente lo antes posible", ha asegurado Bush desde Crawford (Texas), donde pasa sus vacaciones.
Según el proyecto estadounidense, el Consejo debería estudiar dos proyectos de resolución, el primero referente al establecimiento de un alto el fuego y el segundo al despliegue de una fuerza de paz internacional.
Reunión especial del Consejo de Derechos Humanos de la ONU
Por otra parte, el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas celebrará una reunión especial a finales de esta semana, a petición de varios países árabes, para examinar alegaciones sobre violaciones de derechos humanos por parte de Israel, según ha anunciado Marie Heuze, portavoz de la ONU. China y Rusia se encuentran entre los países fimantes de la petición, que no hace ninguna alusión a posibles violaciones de derechos humanos por parte de la guerrilla de Hezbolá, a la que Israel acusa de utilizar escudos humanos.
La petición de celebrar una sesión especial de este organismo de la ONU ha sido presentada por Túnez, cuyo embajador ante Naciones Unidas ha asegurado que episodios como el de Qana, en el que unos 30 civiles libaneses murieron al ser bombardeado por Israel el edificio donde se refugiaban, suponen una "grave violación de los derechos humanos".
