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Urdangarin cumplirá el resto de su condena en semilibertad en Álava

El marido de Cristina de Borbón trabajará en un bufete y deberá participar en un programa de reinserción para condenados por delitos económicos

Iñaki Urdangarin
Iñaki Urdangarin, este miércoles en Madrid.Chema Clares (GTRES)
Óscar López-Fonseca

Iñaki Urdangarin, en tercer grado penitenciario o régimen abierto desde el pasado enero, pasará a partir de la próxima semana a cumplir lo que le resta de condena en las mismas condiciones de semilibertad en la prisión de Zaballa (Álava), según confirman a EL PAÍS varias fuentes penitenciarias. De este modo, el marido de la infanta Cristina de Borbón dejará de acudir a dormir de lunes a jueves en el Centro de Inserción Social (CIS, para presos en semilibertad) de Alcalá de Henares (Madrid), como hacía hasta ahora, y lo hará en el penal de Álava, lo que le permitirá disfrutar de los fines de semana libres cerca de Vitoria, donde reside su madre, Claire Liebaert, y varios de sus hermanos.

Instituciones Penitenciarias ha autorizado este cambio después de que Urdangarin haya justificado tener una oferta de trabajo en la capital vasca. En concreto, en un bufete de abogados, por lo que dejará su labor como auxiliar técnico en atención a personas con discapacidad que desempeñaba hasta ahora en el centro Don Orione, en Pozuelo de Alarcón (Madrid). Según fuentes penitenciarias, lo que no se contempla por ahora es que se le coloque una pulsera de control telemático, lo que permitiría al marido de la infanta cumplir el resto de la condena en su casa sin tener que volver a prisión a dormir ningún día de la semana.

El traslado tampoco afectará a la participación del cuñado del rey Felipe VI en el nuevo programa de reinserción de delincuentes económicos (conocido por las siglas PIDECO) que el juez de vigilancia penitenciaria impuso como condición cuando autorizó su semilibertad, y que deberá seguir durante más de 10 meses en la prisión vasca. Urdangarin ha cumplido dos años y ocho meses (ingresó en prisión el 18 de junio de 2018) de los cinco años y 10 meses de condena que le impuso el Tribunal Supremo por el caso Nóos de corrupción.

Urdangarin quería estar cerca de su familia toda vez que su esposa permanece en Ginebra (Suiza) con su hija menor, Irene, que estudia allí. Las restricciones impuestas por la pandemia condicionan los viajes de Cristina de Borbón, ya que debe guardar cuarentena cuando regresa a Suiza. Desde que accediera a la semilibertad, han sido la infanta Elena y Cristina Borbón-Dos Sicilias quienes han acompañado al cuñado del Rey en sus horas fuera de prisión cuando no trabajaba.

La situación penitenciaria de Urdangarin ha dado un vuelco importante en los dos últimos meses. A finales de diciembre, Instituciones Penitenciarias acordó aplicarle el artículo 100.2 del Reglamento Penitenciario, lo que permitió comenzar a disfrutar de un régimen de vida penitenciario similar al tercer grado y abandonar la prisión de Brieva (Ávila), donde era el único recluso en el módulo de hombres. Entonces pasó a una celda del CIS de Alcalá de Henares, del que salía a diario para ir a trabajar a la institución en la que colaboraba desde hacía más de un año en la atención a personas con discapacidad. Al término de la jornada, el cuñado del Rey debía volver al centro para dormir. También debía permanecer en el recinto penitenciario los fines de semana, salvo uno al mes que salía de permiso.

Esa situación, sin embargo, duró poco. A finales de enero, el titular del Juzgado de Vigilancia Penitenciaria número 1 de Castilla y León, Florencio de Marcos, estimó un recurso de Urdangarin y le concedió el tercer grado, por lo que ya desde entonces estaba en semilibertad y solo tenía que dormir de lunes a jueves en el CIS. Además, salía todos los fines de semana, y no uno al mes como hasta aquel momento, y vio cómo aumentaba de 36 a 48 el número de días de permisos que podía solicitar al año.

Aquel cambio a tercer grado también le ha abierto la puerta a que a partir del 1 de mayo de 2022, cuando cumple dos terceras partes de la condena, pueda solicitar la libertad condicional adelantada, un beneficio penitenciario regulado por el artículo 90.2 del Código Penal. El propio magistrado, en un auto del pasado agosto en el que autorizaba que Urdangarin saliera de prisión un fin de semana al mes, ya apuntaba que el esposo de la infanta Cristina podría ser excarcelado “como muy tarde” en esa fecha concreta.




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Sobre la firma

Óscar López-Fonseca
Redactor especializado en temas del Ministerio del Interior y Tribunales. En sus ratos libres escribe en El Viajero y en Gastro. Llegó a EL PAÍS en marzo de 2017 tras una trayectoria profesional de más de 30 años en Ya, OTR/Press, Época, El Confidencial, Público y Vozpópuli. Es licenciado en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid.

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