Menú semanal de El Comidista (15 a 21 de febrero)

La legumbre más rápida de cocinar y una buena cantidad de verdura de temporada son la base de una crema que puede tomarse caliente, fría o a temperatura ambiente. El quark y los picatostes le ponen la guinda.

Dados de carne adobada con una mezcla de hierbas y especias, cocinados hasta quedar dorados por fuera pero tiernos por dentro: la versión casera de este clásico de bar merece el -poco- esfuerzo.

La temporada carnavalesca es el paraíso de la fritura y de los dulces sencillos pero altamente reconfortantes. Las orejas que adoptamos hoy cumplen todos y cada uno de esos requisitos. ¿Les darás un hogar?

Convierte una ensalada de col normalita en un fulminante viaje mental por Oriente con esta receta. El coleslaw se aviene a mezclarse casi con cualquier cosa.

Basta de remilgos y complejos: las macarrones con tomate y chorizo son uno de los inventos españoles más grandiosos y no tienen nada de lo que avergonzarse. ¿Chorizo? Lleno, por favor.

Vale: el olor de las mandarinas no se quita fácil de los dedos, pero es un mal menor comparado con su jugosidad.

Esta crema saca a la endivia del viejunismo y le da un toque moderno con unos crujientes chips de zanahoria. Para que salga perfecta, hay que prestar atención a las dos claves de la receta.

Una ensalada tibia que combina diferentes coles cocinadas al punto con un aliño alegre, picatostes caseros, albahaca y una cebolla morada que pierde fuerza al combinarse con las verduras calientes.

La carlota es la tarta ideal para hacer en familia. Para este pastel frío con orígenes nobles y de fácil elaboración, no necesitarás ni horno ni ningún utensilio electrónico.

¿Te encanta la ensaladilla rusa pero no te vendría mal un poco más de variedad para el aperitivo? Aquí tienes una versión en la que el atún se sustituye por una caballa curada en casa.

Volvemos a rendir homenaje al fruto del mar más humilde: el mejillón. Esta vez lo abrimos al vapor y aderezamos con una vinagreta cítrica de tomate seco y avellana, cebollino y un toque picante.

Sentimos decirte que las naranjas no curan los resfriados, pero siguen estando bien ricas.

Un sencillo cambio para la salsa pesto clásica la convierte en un acompañamiento fresco para verduras y carnes: añadir un poco de piña con su punto ácido y a la vez dulce.

Un plato tradicional portugués en el que cambiamos las patatas paja por otras cortadas como para tortilla. El resultado, un juego de texturas que no decepciona.

El tiramisú es uno de los postres más fáciles de hacer, pero hay grandes diferencias entre uno mediocre y uno excelente. Viaja con nosotros a uno de sus templos y descubre las claves para no fallar.

Un bocadillo diferente y sabroso para comidas informales y picoteos. La potencia del cordero combina a la perfección con la salsa de tahina y limón, y la frescura la ponen los brotes y las aromáticas.

El kiwi está de temporada y es una de las frutas con mayor concentración de vitamina C. Ideal para hacerle frente al frío.

Hacer la coliflor en la sartén es sencillísimo, y el tostado que se consigue con este método eleva su sabor a la estratosfera. Una salsa fresca a base de tomate y aderezos italianos le pone la guinda al plato.

Un pastel suave y esponjoso como el algodón que te hará ser infiel a tu tarta de queso de cabecera. Con los mismos ingredientes de siempre pero pasados por el filtro japonés: manga a la vez que zen.

En lugar de comprar su versión industrial y más azucarada que Mr. Wonderful, intenta a preparar este refresco de naranja casero. La cosa cambia.

Pincha en el enlace y descárgate la plantilla de menú semanal de El Comidista. Podrás organizarte los desayunos, almuerzos, meriendas y cenas de toda la semana.