La avenida más famosa de Nueva York es una línea recta de algo más de nueve kilómetros. Su dibujo arranca en el Washington Square Park, al sur de la isla de Manhattan, y se extiende hacia el norte bordeando los cuatro kilómetros de Central Park para morir en el Río Hudson, a la altura de la calle 142.
La zona de la avenida en la que se yergue la Torre Trump, muy próxima a la esquina sureste del mayor parque de la ciudad, es la más lujosa de la avenida. Sufrió enormes cambios en 1908: se eliminaron sus amplias aceras para dar cabida al tráfico de vehículos, al tiempo que los antiguos edificios residenciales dejaban sitio para los grandes comercios. Ese cambio no afectó a las grandes fortunas, que se fijaron en la zona para trasladar sus domicilios, hasta el punto de que los neoyorquinos terminaron llamándola Millionaires’ Row o la Hilera de los Millonarios.