1. Utiliza iluminación LED en casa o empresa.

Si dispones de grandes ventanales también puedes aprovechar las horas de luz natural y consultar la posibilidad de instalar placas fotovoltaicas para convertir la luz del sol en energía.

2. Controla la temperatura de tu espacio.

A veces, un aire acondicionado muy fuerte hace que sintamos frío en verano dentro de un establecimiento. Y lo mismo sucede en los hogares. Si controlas programas la calefacción y el aire acondicionado a temperaturas intermedias, el ambiente será más agradable y ahorrarás energía.

3. Evita utilizar materiales que no sean reciclables.

Separa los residuos, fomenta el reciclaje, los envases retornables y el material reciclado, como el papel para oficina o el aprovechamiento de materiales para crear objetos artesanales tipo DIY (hazlo tú mismo), son algunas de las acciones que puedes comenzar a implementar. La Industria Mexicana de Coca-Cola es el mayor reciclador de PET grado alimenticio en América Latina.

4. Cada gota de agua cuenta

La amenaza del cambio climático implica desertificación y sequía. Por eso, La Industria Mexicana de Coca-Cola impulsa la sustentabilidad y devuelve más del 100% del agua que utiliza en la fabricación de sus productos. Tú también puedes cuidar de este recurso si instalas dispositivos ahorradores de agua en los cuartos de baño y sistemas de doble descarga en los inodoros en tu empresa o en tu hogar.

5. Captadores de lluvia y huertos.

¿Sabías que las azoteas en desuso de los edificios son un espacio perfecto para instalar y cultivar un huerto ecológico? Un sistema de riego por goteo contribuirá a ahorrar agua, pero además puedes colocar en el techo de tu casa u oficina ollas captadoras de lluvia que podrían regar este huerto.

6. Elige proveedores con flotas eficientes y productores locales.

La globalización económica y las mejoras en los transportes nos han permitido comprar productos que se fabrican en el otro extremo del planeta. Pero si elegimos alimentos, productos y proveedores cercanos, evitaremos los costes energéticos y económicos que implican que lleguen a nosotros.

7. Promueve la movilidad sostenible.

¿Podrías financiar el transporte público para los empleados de tu empresa o facilitar el alquiler de bicicletas? Con este ejemplo podemos inspirar a otros ciudadanos anónimos, para que elijan también un transporte no contaminante. Así contribuimos todos en la lucha contra el cambio climático.