_
_
_
_
_

Ayuso intenta recuperar la iniciativa y volver a centrar el 4-M en su choque con Sánchez por la crisis sanitaria

La líder del PP se rodea de su equipo médico y reclama al presidente que actúe contra la cepa india del virus

Isabel Díaz Ayuso, este sábado en Pozuelo de Alarcón. En vídeo, Ayuso y Casado esta mañana en un acto electoral. Vídeo: ISABEL INFANTES (EP) / ATLAS
Juan José Mateo

Frente a la polémica por el choque entre Rocío Monasterio y Pablo Iglesias en la cadena SER, una llamada al orden. Isabel Díaz Ayuso ha reclamado este sábado al PP que obvie un conflicto que pone bajo los focos lo que implica que su Ejecutivo pueda depender de la extrema derecha, como señalan todas las encuestas, y que vuelva a centrar la campaña electoral en confrontar con Pedro Sánchez por la gestión de la pandemia. Ha sido el mejor resumen del temor con el que la formación conservadora observa la posibilidad de que la izquierda se movilice alrededor de la amenaza de muerte a Iglesias, transformando el plácido trayecto que vivía hasta ahora Díaz Ayuso camino de las urnas en un sprint lleno de curvas.

“Lo que está pasando estos días es realmente una confusión completa”, ha dicho Díaz Ayuso en un mitin en Pozuelo de Alarcón en el que ha vuelto a evitar cualquier tipo de crítica hacia Vox. “No tenemos que despistarnos”, ha pedido. “Después de los dos años más difíciles que ha vivido Madrid, nuestra sociedad está más unida que nunca, y no debemos descentrarnos”, ha insistido, quejándose de que los ministros del Gobierno de Sánchez critiquen al Ejecutivo madrileño. Y ha rematado: “No vamos a estar ahora mismo para circos. Tenemos que hablar de lo que sí pasa, y no despistarnos con lo que no pasa. No puede ser que después de dos años de lucha en soledad [con la pandemia] se fabriquen a última hora problemas inexistentes para tapar lo importante. Ahora estamos oyendo cómo hay una nueva cepa, de la India, que está poniendo en jaque el sistema sanitario. ¿Dónde está Pedro Sánchez?”.

Un intento de retomar la iniciativa

Ha sido un intento de retomar la iniciativa en la campaña electoral. Para lograrlo, el PP ha sacado todos los cañones. Su líder nacional, Pablo Casado, ha intervenido para tocar algunos de los grandes clásicos de la formación conservadora (educación concertada, terrorismo y Transición) y defender una difícil equidistancia en la polémica entre Monasterio e Iglesias (”El PP no quiere ni piedras ni balas, ni boicots ni cordones sanitarios”, ha dicho). Alrededor del escenario, guiños inesperados, como el apoyo público a la presidenta de un eminente rajoyista, Fernando Martínez-Maillo, el exnúmero tres del presidente del Gobierno. Una unión del nuevo y el viejo PP en favor de Díaz Ayuso que ha tenido como nexo la crítica a dos políticas nucleares del Gobierno de Sánchez.

Primero ha llegado el turno de la política educativa, y de los ataques a la Ley Celaá, que han incluido cederle los focos a Andrea Matarí, la hija con síndrome de down del diputado popular Juan José Matarí, al que la ministra de Educación reprochó en el Congreso que se quejara de los cambios de la educación especial sin, dijo, saber nada al respecto (luego se disculpó).

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Y luego ha llegado el plato fuerte, la política sanitaria. Díaz Ayuso ha vuelto a reprochar a Sánchez lo que tilda de inacción frente al virus. Le ha emplazado, como siempre, a seguir el ejemplo de la Comunidad de Madrid. Y ha sacado la artillería pesada: uno a uno, ha ido nombrando al consejero de Sanidad, Enrique Ruiz-Escudero; el viceconsejero de salud pública, Antonio Zapatero; la directora general de Salud Pública, Elena Andradas; y el director del hospital Enfermera Isabel Zendal, Fernando Prados Roa. Por primera vez en lo que va de una campaña que empezó el 15 de marzo, los máximos responsables de la gestión de la pandemia en Madrid han apoyado a Díaz Ayuso en un mitin.

“Han sufrido mucho. Y nunca dijeron que no”, ha dicho la presidenta de la Comunidad. “Es el equipo que me representa: la gente que dice sí a la adversidad, que se echa a las espaldas situaciones tan difíciles como las que hemos vivido”.

Una forma, por comparación, de criticar a Sánchez. Así espera recuperar Díaz Ayuso la iniciativa camino de las urnas del 4-M, que ve como un trampolín que facilite la llegada a La Moncloa de Casado. “Estas elecciones van a cambiar el rumbo de España, Pablo, y tú vas a ser quien lo dirija a partir de entonces”, ha asegurado.

Suscríbete aquí a nuestra nueva newsletter sobre Madrid

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Juan José Mateo
Es redactor de la sección de Madrid y está especializado en información política. Trabaja en el EL PAÍS desde 2005. Es licenciado en Historia por la Universidad Complutense de Madrid y Máster en Periodismo por la Escuela UAM / EL PAÍS.

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_